"Estos presupuestos contravienen la declaración del 9-N" porque "no hacen un ejercicio de soberanía política". Con estas palabras, la diputada de la CUP Anna Gabriel ha justificado la negativa de su partido a retirar la enmienda a la totalidad y ha exigido "recuperar márgenes de soberanía" para conseguir la ruptura.

Sacándose toda responsabilidad de encima, Gabriel ha querido dejar claro en El Matí de Catalunya Ràdio que si no hay más recursos para la emergencia social, no es por su partido, sino porque se han entrado a trámite unos presupuestos "sin que se hayan acabado las conversaciones con la CUP".

A su parecer, "no es cierto que en la negociación de los presupuestos sólo hayamos reclamado gestos rupturistas" porque "la mirada de la CUP es global al conjunto de los presupuestos" y ha querido calmar los ánimos asegurando que "hay un cierto margen para acabar el año si nos fijamos en las partidas que no hemos ejecutado del 2015".

Negando que la mirada cupaire se centre sólo en políticas sociales, Gabriel ha querido aclarar que los presupuestos "son muchas más cosas" y ha querido desvincularse –otra vez– de toda responsabilidad porque "si la seguimos situando en dos partidos políticos, no le hacemos ningún favor a la hazaña gigantesca que sacamos adelante".

La vigencia del pacto, en duda

Cuestionada y recuestionada varías veces por Mònica Terribas, Gabriel finalmente ha puesto de relieve que el pacto de estabilidad parlamentaria con Junts pel Sí "es vigente si se sitúa la declaración del 9-N en el centro de esta legislatura", cosa que, ahora mismo, cree que no es así, y ha negado que la CUP esté rota después de la votación de ayer, que quedó muy ajustada, con 29 votos en contra de retirar la enmienda, 26 a favor y 3 abstenciones.

"Espero que no aprobemos declaraciones como las del 9-N y después las guardamos en un cajón", ha soltado en el aire indirectamente a JxSí, y ha aprovechado para reclamarles "actitudes claras y nítidas", después de cargar contra ellos porque "se adelantaron una semana cuando aún teníamos muchas cosas para abordar".

"¿Qué voluntad hay que la CUP apruebe los presupuestos si hacen esto?", se ha cuestionado, al mismo tiempo que ha sacado a la luz que "alguien que concurre a las elecciones del 26-J entorpece la negociación afirmando que no se podían permitir más concesiones a la CUP".