Las condiciones que Carles Puigdemont ha puesto sobre la mesa para empezar un proceso de negociación han servido para unificar el bloque de la derecha y ultraderecha española en torno al intento de investidura de Alberto Núñez Feijóo, y a la vez denunciar la posibilidad de pacto entre Junts y el PSOE. El líder del PP y de Vox, Santiago Abascal, se han reunido este martes en el Congreso de los Diputados para abordar el debate del 26 y 27 de septiembre y la conferencia del presidente en el exilio ha sobrevolado el encuentro. En la salida, Feijóo ha dicho que su intento de investidura no será objeto "de una subasta" ni "de un chantaje", como sí que está haciendo, a su entender, Pedro Sánchez con las formaciones independentistas. Según ha asegurado Abascal, uno y el otro han coincidido en que el Estado español "se enfrenta a una amenaza histórica en la Constitución española, a la convivencia y un momento de excepcionalidad nacional y democrática".

El PP y Vox están preparados para aparcar las diferencias que existen y abonan el terreno ante la negociación que presumiblemente se abrirá entre el PSOE y los partidos independentistas. De hecho, quieren aprovechar la sesión parlamentaria para poner en evidencia las relaciones todavía embrionarias que hay entre el sector progresista español y el independentista catalán. En este contexto, Feijóo ha afirmado que defenderá "la igualdad entre los españoles con todos los instrumentos" y ha asegurado que España "está sufriendo un proceso de anomalía democrática".

"Inaceptable, imposible e inasumible"

"El fin, la investidura, no significa renunciar al principio de igualdad", ha constatado Feijóo, que ha demonizado las peticiones de Puigdemont, como la amnistía, el referéndum: "Es un planteamiento inaceptable, imposible e inasumible". "No quiero ni puedo aceptar el precio que ha puesto Puigdemont a la unidad de España". Sobre la reunión con los representantes de Junts per Catalunya, Alberto Núñez Feijóo ha asegurado que "nos podemos ahorrar el encuentro si plantean la amnistía y la autodeterminación".

En la reunión, Feijóo, que mañana se reúne con el presidente de las Islas Canarias (CC), Francisco Clavijo, ha presentado a Abascal el mismo documento que mostró a Sánchez, a partir del cual proponía una legislatura de dos años con un gobierno en solitario del PP y alcanzando seis grandes pactos de Estado. Vox los ha aceptado.

Compromiso de Vox con el PP

El líder de Vox, a pesar de ser consciente de las "dificultades", ha comprometido sus 33 votos para la investidura de Feijóo, "como alternativa a la vergüenza de ver los partidos separatistas subastar la nación de una manera impúdica". En este sentido, Abascal considera que el intento del PP servirá para "ver la amenaza que hay sobre los españoles" y "ayudará a preparar la resistencia al golpe que se perpetrará desde La Moncloa", en referencia a las condiciones que Puigdemont ha situado en el mapa de la negociación para la investidura. De las exigencias de Puigdemont ha dicho que son propias "de un delincuente, de un prófugo que no da la cara y que ha robado la unidad nacional y la convivencia de los catalanes."