El magistrado del Tribunal Constitucional (TC) Juan Carlos Campo, del ala progresista del órgano, ha decidido abstenerse de deliberar sobre un recurso de amparo presentado por un particular en relación con la futura ley de amnistía. Lo hace, alega, para salvaguardar la "imparcialidad" del TC, después de que en los informes sobre los indultos a los condenados por el Procés que firmó cuando era ministro de Justicia del gobierno de Pedro Sánchez afirmase que esta medida era "inconstitucional". Así lo indican fuentes de la corte de garantías consultadas por Europa Press, las cuales adelantan que en la sesión plenaria prevista para este mismo jueves se abordará el asunto. La abstención de Campo se suma a las que ya ha presentado ante la deliberación en el TC de todas las leyes que salieron del Consejo de Ministros, en el cual él estaba al frente de Justicia.

 

Hay que recordar que en los informes de los indultos Campo plasmó que, "a diferencia de la amnistía, claramente inconstitucional, que se reclama desde algunos sectores independentistas, el indulto no hace desaparecer el delito". Al margen, el Constitucional ha recibido otro recurso de amparo de otro particular, también por la futura amnistía, donde ya se plantean recusaciones contra Campo, Laura Díez y el presidente del tribunal, Cándido Conde-Pumpido, según ha avanzado 'El Español'. Las recusaciones contra Campo y Díez en temas relacionados con el actual Gobierno han sido recurrentes desde que fueron los dos magistrados que se incorporaron al TC a propuesta del Ejecutivo de Pedro Sánchez, el primero después de ser ministro de Justicia y la segunda después de ejercer como alto cargo en la Moncloa.

En cuanto a Conde-Pumpido, en 2021 se abstuvo de todos los asuntos vinculados al Procés, después de que los líderes independentistas lo recusaran al estimar que no era "neutral" ni "imparcial" por una conferencia celebrada en noviembre de 2017 donde dio su opinión sobre este tema. Entonces, manifestó su "preocupación" por los hechos que se estaban produciendo en Catalunya y los calificó de "pretensión de subvertir el Estado social y democrático de Derecho utilizando fraudulentamente la misma bandera de la democracia".

Mayoría progresista en el TC

Desde la última renovación parcial del TC, el enero pasado, el ala progresista cuenta con una holgada mayoría de 7 magistrados —entre ellos Conde-Pumpido, Campo y Díez— ante los cuatro conservadores. No obstante, este amplio margen podría verse disminuido precisamente por el juego de las abstenciones y recusaciones, que en otros asuntos donde se han planteado ha quedado neutralizado. Así, por ejemplo, ocurrió en recursos como los presentados contra las leyes del aborto o de la eutanasia. En el primero, la magistrada conservadora Concepción Espejel se abstuvo alegando que en su momento se pronunció sobre la ley porque participó en la elaboración del informe firmado por el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), del cual formaba parte. Pero el Pleno del TC impidió que se apartara al considerar que se trataba de una opinión de hacía "más de 12 años".

Las fuentes consultadas aclaran que ninguno de los dos recursos de inconstitucionalidad presentados por la futura amnistía tienen ningún recorrido porque todavía no hay una ley aprobada cuyos efectos hayan podido afectar a los derechos de un ciudadano particular. No obstante, las decisiones que adopte el TC sobre la abstención de Campo y las recusaciones lanzadas sí que servirán para ir configurando el Pleno que tendrá que decidir sobre la medida de gracia al Procés.