El juicio a Laura Borràs por presunta fragmentación de contratos en el TSJC sigue avanzando. Y los partidos políticos, siendo más explícitos o menos, sevan posicionando. Lo ha hecho, a su manera, Esquerra Republicana, que no ha querido entrar a valorar directamente lo que está pasando en el procedimiento oral contra la presidenta suspendida del Parlament y líder de Junts per Catalunya. Pero la portavoz nacional y secretaria general adjunta de ERC, Marta Vilalta, sí que ha querido contraponer que los republicanos "defienden la integridad de los servidores públicos" y que "tienen tolerancia cero con la corrupción". Y ha recordado que ningún miembro de su dirección tiene ninguna acusación en este sentido.
El informático Isaías Herrero ha incriminado a Laura Borràs en la supuesta gestión irregular de la Institució de las Lletres Catalanes (ILC) cuando ella era directora, entre los años 2013 en el 2017. Herrero ha asegurado que "acordó" con la actual presidenta de Junts que le encargaría la renovación de la web de la institución con "un trato encubierto", en palabras de la fiscal Assumpta Pujol, este lunes, en la tercera sesión del juicio en el TSJC. "Acordamos presentar varios contratos; uno bueno y dos comparsas", ha declarado Herrero, e incluso ha admitido que Borràs le facilitó datos y el nombre de una empresa para presentar presupuestos falsos, para simular que se hacía un concurso, pero todos los contratos, que no superaran los 20.000 euros, se los adjudicaba a él. Se hicieron 18 contratos fraccionados que suman unos 309.000 euros. La renovación de la web fue realizada. La renovación de la web fue hecha.
Preguntada y repreguntada sobre las sesiones del juicio del TSJC a Laura Borràs, Marta Vilalta ha reiterado que no entrarán a valorar "lo que vayan diciendo los acusados o testigos", porque sería "poco útil". Ahora bien, también ha defendido la "integridad" que tienen que tener los servidores públicos. "Cuando hay denuncias, se tienen que aclarar los hechos y tomar las decisiones", ha defendido Marta Vilalta. Y ha reivindicado la posición de su partido: "Siempre seremos muy tajantes desde ERC, tolerancia cero ante cualquier vínculo con la corrupción. No hay medias tintas". En este sentido, ha subrayado que en la dirección republicana "no hay nadie que tenga acusaciones vinculadas a la corrupción". Con respecto a la situación de interinidad de la presidencia del Parlament, señalan que "ahora no toca hacer hipótesis de futuro", a pesar de lamentar que en su momento los junteros decidieron "abandonar" la presidencia no sustituyendo Borràs.
Represión: interpela Sánchez y Junts
La rueda de prensa de los republicanos ha empezado denunciando, de nuevo, que la represión "sigue bien vigente", después de las peticiones de la Fiscalía de siete años de prisión para Josep Maria Jové y seis años para Lluís Salvadó por malversación agravada por los preparativos del 1-O. Sin embargo, Marta Vilalta ha reivindicado que ERC "no solo denuncia las injusticias, sino que intenta combatirlas" con reformas como la derogación del delito de sedición, que ha calificado de "pasos adelante" que fuerza a los jueces a "arbitrariedades" más reforzadas. La portavoz republicana ha considerado que todo esto les dará argumentos de cara a defenderse en Europa, concretamente en el Tribunal Europeo de Derechos Humanos. Ha reiterado que "desde de ERC no cambiaremos los jueces, pero sí que podemos cambiar las reglas del juego, como hemos hecho". Y ha insistido en que la reforma del Código Penal "es muy clara" y no necesita correcciones legislativas.
En este contexto, los republicanos han dirigido preguntas "retóricas" al gobierno del Estado: "¿Qué hará Pedro Sánchez? ¿Seguir acomplejado por la derecha y la derecha más extrema y no ser capaz de defender sus propias reformas? No puede ser que esté atrapado y no afronte las reformas que se tienen que hacer, especialmente en la judicatura". Pero Marta Vilalta también se ha dirigido a Junts per Catalunya, a los que ha instado a "arremangarse" y "ayudar" en la vía negociada, "saliendo de la zona de confort y la comodidad de las críticas". Y ha remachado al respecto: "El camino de la negociación no es un camino recto, es complejo y tiene idas y venidas, pero es lo único que nos conducirá a los objetivos políticos".
La división de la ANC
Los republicanos tampoco entran explícitamente en la división que hay en la Assemblea Nacional Catalana, pero sí que lo ha hecho de forma más sutil. Preguntada sobre la cuestión, Marta Vilalta ha sostenido que "la ANC, cuando más útil ha sido a hacer avanzar el país hacia la independencia, es cuando era una entidad movilizadora, capaz de aglutinar grandes mayorías, de defender la pluralidad y la transversalidad, era empática y quería incluir". Y ha remachado el dardo a la entidad soberanista: "Esto ahora lo ha perdido. Lo que representaba la ANC de la presidenta Forcadell ya no existe. Se ha alejado mucho de aquello".
No irán a la manifestación contra la B-40
Los republicanos se han tragado el sapo del Quart Cinturó a cambio de los presupuestos de la Generalitat, aunque han dejado claro que ellos están en contra. Pero no va a ir ningún dirigente suyo el próximo domingo 26 de marzo a la manifestación convocada contra este proyecto ni hará ningún llamamiento a asistir. En este sentido, Marta Vilalta se ha limitado a decir que sus bases son "libres" de hacer lo que crean oportuno.