"Nos hubiera gustado un resultado mejor". Con estas palabras el líder de Unidas Podemos, Pablo Iglesias, ha reconocido este domingo por la noche que los resultados de estas elecciones generales no han sido los esperados. Sin embargo, ha remarcado la importancia de que las izquierdas puedan formar gobierno y ha extendido una vez más la mano a Pedro Sánchez. "Todo está abierto. Ya he trasladado a Sánchez nuestra voluntad", ha dicho.

La coalición ha obtenido un total de 42 diputados, muy por debajo de los resultados de las de los últimos comicios, el año 2016, en que llegaron en los 71. UP ha pasado de ser la tercera fuerza a la cuarta, por detrás de Ciudadanos. En total, la candidatura ha perdido más de un millón y medio votantes en España y no ha conseguido hacerse con la victoria en ninguna provincia.

Iglesias ha admitido errores y ha considerado que uno de los problemas principales que les ha llevado a estos malos resultados han sido las disputas internas del partido de los últimos meses. "Uno de los problemas ha sido dar una imagen que no ha estado a la altura", ha asumido. Sin embargo, ha querido destacar que este número de diputados "ya les sirve para cumplir los objetivos": "Las elecciones no van de vencer, sino de convencer. No van de ganar, sino de sumar"

Sea como sea, el partido será determinante en un posible escenario de pacto de izquierdas. Unidas Podemos tendrá que entenderse con el PSOE y los independentistas para estar en el gobierno, siempre que Pedro Sánchez quiera, ya que también tiene la opción de gobernar con Ciutadans.

UP pierde más de un millón y medio votos

Las pasadas elecciones la coalición de Podemos entró con fuerza en el Congreso con 5.049.534 votos, un 21,1%. Entonces, Pablo Iglesias iba de la mano de Izquierda Unida — liderada por Alberto Garzón- Equo, en Común Podemos, Compromiso y En Marea. La coalición consiguió ser la tercera fuerza en la cámara baja con 71 diputados, más del doble que Ciudadanos (32), el partido que los precedía.

El año 2016, cinco provincias — Barcelona, Tarragona, Vizcaya, Álava y Guipúzcua — quedaron teñidas de lila, pero este año Unidas Podemos no ha conseguido hacerse con la victoria en ninguna provincia española. De hecho, si las pasadas elecciones el partido aspiraba a hacer 'sorpaso' a los socialistas y a situarse como la segunda bastante española, esta vez, vistos los resultados que auguraban las encuestas, los podemitas ya eran conscientes de que la popularidad del partido descendería.

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Comparativa de España de las elecciones de este domingo y las del año 2016.

El partido no cierra puertas

Por eso, como ya habían hecho a lo largo de la campaña, los líderes de Unidas Podemos han puesto en valor el hecho de que las izquierdas sumen y han dejado claro, una vez más, que están abiertos a un acuerdo. De hecho, Iglesias ya ha informado de que ha hablado con Sánchez y han quedado para hacer una primera reunión, aunque ha pedido paciencia y discreción.

Para hacerlo, sin embargo, necesitarían el apoyo del independentismo, un hecho del que el partido de Iglesias no se de ello ha mostrar contrario. Los diputados independentistas en el Congreso podrían volver a ser imprescindibles para formar el futuro Gobierno y de eso dependerá, en buena medida, si es posible abrir un nuevo escenario de diálogo entre ejecutivos después de las elecciones.

Con respecto a la situación interna de la formación, Iglesias ha admitido errores y es evidente que de estos resultados electorales dependerá, y mucho, la deriva del partido y su posible renovación. Hay que recordar que este año la candidatura de Unidas Podemos estaba formada por la coalición de Podemos, Izquierda Unida, Equo, Batzarre-Asamblea de Izquierdas y Alto Aragón en Común. Además, a este partido se suman los resultados de En Comú Podem a Catalunya y los de En Marea en Galicia.