Las urnas andaluzas son este domingo el primer escenario donde se verá cuál ha sido realmente el efecto electoral de los discursos contra Catalunya, que han capitaneado el PP y Cs, y de las posiciones de extrema derecha de Vox. Son los primeros comicios que se celebran desde el supuesto auge de la formación ultra, que se hizo visible en un acto en Vistalegre pero que todavía no se ha comprobado con qué apoyo real cuenta en unas elecciones.
Uno de los temas más explotados por este partido y por el resto del unionismo ha sido todo aquello relacionado con el proceso catalán. Estas también son las primeras elecciones -fuera de Catalunya- en que el endurecimiento de los mensajes de estos partidos contra el independentismo se ha hecho patente. Todos han acabado hablando sobre indultos a los presos, contactos de Pedro Sánchez con los partidos soberanistas o de la reunión de Pablo Iglesias con Oriol Junqueras en la prisión de Lledoners.
El líder de Vox, Santiago Abascal, en un mitin de campaña / Efe
Son asuntos que, a opinión de los andaluces y con un poco de sentido común, los partidos andaluces tendrían que dejar fuera de la campaña, ya que no tienen ninguna influencia directa sobre sus políticas autonómicas. La comunidad tiene, por ejemplo, una tasa de paro de un 22,9% y una de las rentas per cápita más bajas de España. Problemas que se han tratado mezclados con discursos contra Catalunya e incluso de tono xenófobo enfocados a recoger votos.
Este domingo por la noche ya no habrá más espacio para especulaciones y quedará demostrado si la estrategia realmente funciona... o no. La campaña 'con acento andaluz' que reivindicaba Susana Díaz al convocar las elecciones ha quedado difuminada y protagonizada por una sobrepresencia de los líderes nacionales de los partidos, como Albert Rivera o Pablo Casado -que ha participado por primera vez en una campaña desde que alcanzó la presidencia del PP-.
Pactos con el PSOE o...
Hay varios escenarios que pueden salir de estos comicios según las últimas encuestas publicadas. En general, se mantiene una victoria socialista -como siempre desde la Transición-, pero no se prevé que llegue a la mayoría absoluta de 55 escaños. Eso significa que Díaz tendrá que abrirse a pactos con los otros partidos. Los candidatos más probables de ser los socios fijos o puntuales del PSOE son Ciudadanos -como ya había sido durante la pasada legislatura- o Adelante Andalucía.
De hecho, estas elecciones han sido convocadas tres meses antes de lo previsto ya que Susana Díaz perdió el apoyo de Cs. Un nuevo pacto entre los dos partidos no pintaría un escenario de mucha estabilidad teniendo en cuenta los antecedentes. En el caso de Adelante, el gobierno tendría que aceptar a abrirse a las propuestas de la izquierda andalucista. Por ahora, ninguno de estos dos partidos tiene predisposición a pactar con Díaz y todavía menos el PP que, por si quedaban dudas, su candidato firmó este compromiso ante notario.
Los cuatro candidatos principales antes del debate en TVE / Efe
...gobierno de derechas o repetición
En caso de que todos dieran la espalda al PSOE, quedaría la posibilidad de un pacto entre PP y Cs -y Vox, si llega a entrar en el Parlamento. Los dos partidos están reñidos para hacerse con la segunda posición y, por lo tanto, todavía no se sabe quién sería la formación dominante en el caso que un pacto de investidura o de gobierno fuera viable.
Si los partidos no consiguieran llegar a ningún tipo de acuerdo, no se descarta que se tuvieran que repetir los comicios en los próximos meses, coincidiendo incluso con las elecciones generales o europeas.