Después del relato del jefe de la BRIMO de Barcelona el 20-S mostrando un escenario complejo delante de la Conselleria de Economia, su número 2 ha resituado el relato y ha afirmado que "el comportamiento de la gente no era violento".

Sobre el pasillo de voluntarios, que su jefe ha cuestionado durante el interrogatorio, el subjefe de la BRIMO ha dicho: "Pudimos entrar perfectamente por el cordón de voluntarios. No tuvimos ningún tipo de problema".

Esta versión contradice en parte al testigo anterior que ha mostrado a un Jordi Sànchez soberbio y una multitud dificil de gestionar.

Durante toda la mañana no hubo ningún lanzamiento de objetos

El subjefe de la BRIMO ha tenido un relato similar al de los otros testigos que previamente han explicado el ambiente el 20-S: sin lanzamientos por la mañana y con una botella voladora por la tarde. "Por la tarde un agente recibió un golpe de una botella de agua".