El Ministerio de Educación y Formación Profesional trabaja en un nuevo currículum educativo, que hará público pronto. Entre los aspectos que el Gobierno de Pedro Sánchez quiere cambiar está el uso de la lengua en las escuelas. En una entrevista en El Mundo, la ministra Pilar Alegría ha asegurado que trabajarán para que el castellano tenga más presencia en las aulas catalanas.

"En el marco de las competencias de este Gobierno, estamos trabajando en el borrador de la distribución horaria de las diferentes asignaturas, y en él daremos más importancia a la lengua castellana", ha declarado Alegría, quien ha asegurado que el Gobierno considera "absolutamente esencial para el desarrollo de los estudiantes" que haya una gran presencia del castellano en el currículum educativo, así como de matemáticas y materias artísticas.

Entre las primeras acciones que prepara el Ejecutivo de Sánchez para continuar con la ofensiva contra el catalán se encuentra el aumento de las clases de castellano en la educación secundaria. "Lengua castellana será la asignatura que más horas tendrá en ESO. En los próximos días trasladaré a las comunidades autónomas la distribución de las materias para que puedan completar el currículum", ha anunciado la ministra.

Alegría considera que de esta manera se está protegiendo el derecho del alumnado a cursar sus estudios en la lengua deseada, mientras que al mismo tiempo se garantiza que se aprendan las lenguas cooficiales. Las encuestas y los estudios sobre el uso del catalán, sin embargo, señalan hacia otro lado, un panorama en el cual la lengua catalana cada vez cae más en desuso ante el castellano. Como recuerda la ministra: "La educación es una cuestión de Estado".

Nueva manera de evaluar

La entrevista también ha puesto el foco en la nueva manera de evaluar a los estudiantes, donde la figura del suspenso cambia. La ministra ha remarcado que el Estado español es de los que más repetidores tiene. "Cuando un estudiante suspende no es un fracaso individual, sino colectivo", ha expresado Alegría, y ha añadido: "La repetición de curso como solución estructural es negativa. Se trata de poner medidas para, cuando se detecten las dificultades de los estudiantes, poder permitir que aprendan al máximo"

Siguiendo este sentido de la colectividad, la ministra ha señalado que con la nueva ley educativa repetir curso se decidirá de forma colegiada y la evaluación contínua jugará un peso fundamental, dejando atrás la imagen del examen en que uno se puede jugar todo el curso.

 

 

Imagen principal: Pilar Alegría, ministra de Educación y Formación Profesional, durante su toma de posesión / Efe