Unidad independentista para dar apoyo a los miembros de la Sindicatura Electoral del 1-O que han sido citados para declarar este miércoles acusados de desobediencia y usurpación de funciones públicas. Los partidos independentistas, la Assemblea Nacional Catalana (ANC) y Òmnium se han concentrado en la Ciutat de la Justícia, donde han denunciado que se trata de un nuevo ataque con más "fuerza" por el resultado del 14-F.
El independentismo en bloque ha dado apoyo a los síndicos del 1-O y han lamentado la "represión" del Estado. ERC, Junts y la CUP han reivindicado la "valentía" para seguir adelante con el proceso de autodeterminación. Òmnium y la ANC han lamentado la "nueva causa contra el independentismo" y han afirmado que los tribunales internacionales anularán la causa contra los síndicos.
Las reacciones políticas
La secretaria general adjunta y portavoz de ERC, Marta Vilalta, ha exigido la absolución y la amnistía de todo el mundo que sufre la "injusticia" del Estado, y ha subrayado que el juicio es "un ejemplo más". La dirigente republicana ha comparado la "represión" de España contra el independentismo con los "privilegios" que tiene la familia real.
Por su lado, la vicepresidenta de JxCat, Elsa Artadi, ha aseverado que la "represión" actúa ahora con más "fuerza y contundencia" porque el independentismo llegó al 52% de votos el 14-F. La portavoz de Junts también ha lanzado una advertencia al Estado: "Estaremos ahí y lo volveremos a hacer, seguiremos fuertes y caminando hacia la independencia".
En una línea similar, Dolors Sabater, de la CUP, ha manifestado que el juicio es un "aviso" y una "amenaza" porque se produce después de unas elecciones en que el independentismo ha crecido. "Con este ataque judicial contra la sindicatura del 1-O, el régimen del 78 da un paso más en la escalada represiva antidemocrática, pasando el listón de perseguir personas ideológicamente por su función profesional y académica", ha denunciado Sabater, que ha garantizado la "firmeza" y el "compromiso" del independentismo para mantener su "valentía".
Delante de la Ciutat de la Justícia también se ha presentado el president de la Generalitat Quim Torra, inhabilitado por el Supremo por defender la libertad de expresión. Torra ha rechazado la mesa de diálogo con el Estado porque "no sirve para nada", y ha exigido al Gobierno que pare la "represión": "Todo eso pasa bajo un gobierno de socialistas y comunes, y todo eso podría no pasar si quisieran que no pasara", ha insistido. El president ha apelado a la "necesidad urgente" de la amnistía, y ha reiterado que la Moncloa tiene que tomar "la decisión" para parar la "represión".
Imagen: Sergi Alcázar
Apoyo de las entidades
Por otra parte, el vicepresidente de Òmnium, Marcel Mauri, ha lamentado la "nueva causa contra el independentismo", y ha garantizado que el movimiento continuará decidido para "volver a hacerlo". Mauri ha reivindicado de nuevo la autodeterminación y la amnistía como "única solución" al conflicto entre Catalunya y el Estado.
Finalmente, la presidenta de la ANC, Elisenda Paluzie, se ha mostrado convencida de que la causa contra los síndicos del 1-O acabará anulada en los tribunales internacionales "por la vulneración de derechos fundamentales". "No se pueden convertir derechos en delitos, y así acabará la justicia española, condenada en tribunales internacionales y a ojos del mundo", ha concluido.
Apoyo de los rectores de las universidades
Los rectores de la Universitat de Barcelona (UB), la Universitat Pompeu Fabra (UPF) y la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB) han participado en la concentración para dar apoyo a los académicos imputados por el 1-O. El rector de la UB, Joan Guàrdia, ha defendido la tarea de los académicos y ha pedido priorizar la ciencia y la academia. El rector de la UPF, Jaume Casals, ha sostenido que los imputados no hacen "nada" en un tribunal y ha calificado de "absurda" la imputación. Finalmente, el rector de la UAB, Javier la Fuente, ha afirmado que la tarea de la Sindicatura del 1-O fue "legítima" y se ha mostrado esperanzado en la absolución del caso.
Aparte de los rectores de las universidades, los partidos políticos y las entidades, los síndicos han recibido el apoyo de decenas de personas que se han concentrado para trasladarles calor. Después de varios llamamientos de consignas contra la "represión" e independentistas los imputados han accedido a la Ciutat de la Justícia. Lo han hecho por un pasillo de honor delante de las puertas formado por varios abogados con toga.