"Nunca he puesto en cuestión que Fidel Castro fuera un dictador. Yo he puesto en valor la Cuba social". Con estas palabras, la consellera de Trabajo, Dolors Bassa, se ha defendido de las críticas que le han llovido desde ayer tarde, cuando publicó cuatro tuits sobre la muerte del padre de la revolución cubana.

Lo ha dicho en El Món a RAC1, dónde ha puesto especial énfasis en la diferencia entre "las libertades" y el papel de Fidel Castro en la eliminación de la desnutrición infantil, así como para "sacar el analfabetismo". "Una cosa es el tema político, el otro el social", ha subrayado, y ha añadido que, aunque "hace falta poner en valor el papel" de Castro en estas cuestiones, también ha dicho bien claro que la dictadura no tenía que ser.

Precisamente por eso, ha condenado que Fidel Castro estuviera tanto del tiempo en un poder en forma de dictadura y ha expresado que, según su opinión, "tendría que haber habido elecciones antes".

Sin comparar con Europa

Eso sí. Bassa ha destacado que "Cuba se tiene que mirar desde el entorno que está, no la podemos comparar con ningún país de Europa" porque, ella que ha viajado tres veces en viajes de cooperación, ha podido ver como los cambios que se han llevado a cabo en Cuba "no los he visto en ninguno de los países del entorno". "Otra cosa son las libertades", ha sentenciado.

En la serie de tuits, la consellera explica que ha visitado Cuba en tres ocasiones y que, "con pelos y señales", se queda con las cosas buenas "del sistema de la revolución. Educación y sanidad, primero. Identidad y socialismo, segundo," explica Bassa. Para acabar, la política catalana afirma haber conocido países del entorno y dice que "a pesar de reconocer muchas deficiencias y dificultades" se queda "con la Cuba social".

Entre las críticas recibidas aparecía la del secretario del Govern, Joan Vidal, que ponía en duda también vía Twitter que se cite Cuba como ejemplo a seguir.