El expresidente de la Generalitat Artur Mas ha declarado durante 3 horas delante el Tribunal Supremo. Ha respondido a todas las partes, y aunque la Fiscalía y la acusación popular, VOX, habían pedido libertad bajo una fianza de 60.000 euros, Pablo Llarena lo ha dejado en libertad, sin fianza y sin medidas cautelares. Solo tendrá que presentarse en el juzgado cuando Llarena lo requiera.

Mas ha llegado a las nueve menos cuarto de la mañana al Tribunal Supremo para declarar como investigado. Está acusado de pertenecer al comité estratégico por la independencia.

Fuentes de la investigación explican que Mas ha seguido la misma línea que Mireia Boya y que no se ha desdicho de nada.

Una vez fuera el expresidente ha explicado que le ha dicho al juez que "la declaración de independencia del 27 de octubre tuvo un valor puramente simbólico". "El referéndum fue real, la declaración independencia tenía un carácter más parlamentario y simbólico, lo he explicado así", ha concretado Mas.

"Yo defiendo la idea de la soberanía de Catalunya, del derecho a decidir del pueblo catalán. Incluso de la independencia de Catalunya, entendida como un futuro estado catalán, en el marco europeo", ha explicado Mas que ha declarado al juez, y ha expuesto que "este proceso soberanista ha nacido de la raíz del pueblo catalán, que hay que tenerlo en cuenta y que las instituciones catalanas, en todo momento, han intentado en todo momento acompañar este proceso popular hacia la soberanía con una voluntad de acuerdo y negociación de diálogo con el Estado español que no ha tenido contrapartida".

"He explicado que no había un comité estratégico del derecho y del revés", ha afirmado Mas. Y es que Pablo Llarena lo basa todo en lo que dice el Enfocats, el documento encontrado en casa Josep Mª Jové, donde se define toda la hoja de ruta hacia la independencia. "Se nos convocaba a una serie de reuniones de carácter muchas veces informal, de composición invariable, donde se hablaba de política", ha explicado en las puertas del Supremo, donde ha añadido: "Si los políticos no podemos hablar de política, de qué tenemos que hablar?".

"Somos personas escogidas por el pueblo, a través de las elecciones, que tenemos mandatos políticos y electorales que tenemos que intentar cumplir en la medida de nuestras capacidades y posibilidades", ha añadido.

Mas se ha mostrado satisfecho de quedar en libertad y "muy triste" por la situación de cárcel en la que todavía hay determinadas personas y "triste también porque hay personas que están fuera del país y que no pueden volver a riesgo de entrar en prisión". "Esta tristeza es lo que no me permite celebrar lo de hoy con más libertad y sobre todo con más énfasis".

La llegada

Mas ha llegado entre los aplausos de una veintena de personas, básicamente del PDeCAT, que le esperaban en las puertas del Supremo. También le esperaba un grupo de la Falange que la policía ha acabado retirando en una calle lateral del tribunal.

Entre los que esperaban a Mas había Marta Pascal, que declaró ayer como investigada y que salió sin medidas cautelares, David Bonvehí, Míriam Nogueras, Josep Lluís Cleries y Antoni Castellà de Demócratas.

A las 11 h está citada Neus Lloveras. La atención hoy, sin embargo, se centra más en Anna Gabriel, que no tiene previsto ir a declarar mañana, que por lo que pueda pasar hoy con Mas y Lloveras.