En cuestión de un mes y medio, más de 5,5 millones de catalanes y catalanas estarán citados en las urnas para elegir la composición de los 947 plenos de los ayuntamientos del país. Las elecciones municipales 2023 están convocadas el próximo domingo 28 de mayo y, en total, se escogerán cerca de 9.200 concejales en Catalunya. Al mismo tiempo, el resultado de estos comicios no solo será determinante a escala local, sino que también tendrá una clara trascendencia en clave nacional. El PSC, Esquerra Republicana y Junts per Catalunya son las tres principales fuerzas que aspiran a una victoria en número de alcaldías y ediles, unas cifras que les serán providenciales para determinar la composición de otros órganos supramunicipales decisivos para los partidos: los consejos comarcales y las diputaciones, entes con recursos importantes para poder llevar a cabo grandes inversiones y la relevancia de los cuales también está vinculada al poder institucional que otorgan. Por este motivo, estas instituciones también se convierten en una de las principales batallas de esta convocatoria.
🗓️ Calendario de las Elecciones Municipales 2023 en Catalunya: todas las fechas y cuándo se vota
En el conjunto del Estado, hay 38 diputaciones provinciales y tres de régimen foral. En el caso catalán, el territorio dispone de cuatro diputaciones, una por cada provincia: Barcelona, Girona, Tarragona y Lleida. Son los órganos de gobierno y de administración de estas demarcaciones y, especialmente, ayudan a coordinar y gestionar servicios públicos en aquellos municipios más pequeños. Estas entidades son de elección indirecta, justamente porque el resultado de las elecciones municipales es el que determina la composición del plenario. En este contexto, el número de diputados que corresponde a cada una de las diputaciones se fija en función de los habitantes que tiene la demarcación. La escala que se aplica empieza con 25 diputados para aquellos territorios donde hay 500.000 habitantes o menos; sigue con 27 para las zonas donde residen entre 500.001 y un millón de personas; crece a los 31 para las provincias entre 1.000.001 y 3.500.000 ciudadanos y se eleva hasta los 51 cuando supera estos 3,5 millones de vecinos. Así pues, la Diputació de Barcelona tiene 51 diputados; las de Girona y Tarragona tienen 27 y, la de Lleida, 25 escaños.
En el caso de los comicios locales, las listas que concurren son muy diversas y en una gran parte de las localidades de Catalunya siempre se presenta algún partido de ámbito estrictamente municipalista. Con todo, algunos de estos también exploran fórmulas para tener representación en los consejos comarcales y en las diputaciones. Estas fórmulas acostumbran a ser coaliciones electorales: varias formaciones municipales se agrupan bajo el paraguas de una marca a escala comarcal para sumar más fuerza y acceder a estas instituciones. También es un procedimiento habitual en los partidos nacionales, que llegan a acuerdos con estos partidos para evitar la división de voto y perder representatividad en los entes supramunicipales. Este año, por ejemplo, Junts se presenta también con el nombre de Compromís Municipal; así como ERC también ha acompañado en otras contiendas su denominación con Acord Municipal o el PSC, con Candidatura de Progrés.
Entre el 2019 y 2023, Esquerra Republicana es quien ha liderado más diputaciones, ya que ha presidido la de Tarragona y la de Lleida. Por su parte, el PSC ha encabezado la de Barcelona y, la restante —que es Girona—, la ha dirigido Junts per Catalunya. Los órganos de gobierno de las cuatro diputaciones de Catalunya han sido de coalición. En este sentido, el único partido que tiene presencia en todos los ejecutivos es Junts, que ha gobernado con los republicanos en tres diputaciones, con la excepción de Barcelona, donde han compartido cartapacio con los socialistas. Por todo ello, las maquinarias de los partidos ya trabajan, también, en la perspectiva del mandato 2023-2027 en las diputaciones para tener la máxima representación posible y ser determinantes en la gobernanza de estos.
El pacto PSC-Junts en la Diputació de Barcelona, la madre del cordero de la pugna entre los partidos independentistas
El 11 de julio de 2019, la socialista Núria Marín, alcaldesa de l'Hospitalet de Llobregat, fue elegida presidenta de la Diputació de Barcelona para este undécimo mandato con los 16 votos de su grupo y los 7 de Junts per Catalunya. El pleno fue tenso, marcado por los reproches de Esquerra Republicana (con 16 escaños también) a los juntaires para pactar "con los del 155" y por materializar una nueva "entente sociovergente". Además, cerca de 200 personas se concentraron ante la sede de este ente supramunicipal, convocadas por la Assemblea Nacional Catalana, para protestar contra este acuerdo.
La composición de la Diputació de Barcelona este mandato ha sido la siguiente: 16 diputados para el PSC, misma cifra para ERC, 7 para Junts, 5 para En Comú Guanyem, 4 de Ciutadans, 2 del Partido Popular y uno de Tot per Terrassa. La presidencia del órgano se escoge por mayoría absoluta (hacen falta 26 diputados), de manera que el independentismo no llegaba, aunque se sumara a Tot x Terrassa. Núria Marín fue elegida en segunda vuelta, por mayoría simple, con 23 apoyos; mientras que el candidato de ERC, Dionís Guiteras, reunió 17 votos (los de Esquerra y Tot per Terrassa) y el resto de partidos votaron a alguien de su grupo. El acuerdo de los republicanos con los comunes también se avistaba imposible después de que la relación entre ambas formaciones se tensara por la alcaldía de Barcelona: Ernest Maragall ganó las elecciones, pero Ada Colau revalidó la alcaldía con los votos de BComú, el PSC y Barcelona pel Canvi de Manuel Valls.
El órgano se forma por partidos judiciales y más de un tercio de los diputados salen del partido judicial de Barcelona, integrado por la capital catalana, Badalona, Santa Coloma de Gramenet y Sant Adrià del Besòs. En este sentido, PSC y Junts ven providencial la victoria en el ayuntamiento de Barcelona para poder tener más peso en la Diputació, ERC también buscará mejorar —por ejemplo— con la candidatura de Gabriel Rufián en Santa Coloma de Gramenet o el Partido Popular intentará crecer de los dos escaños actuales con una posible nueva primera posición en Badalona.
📌 Candidatos a las elecciones municipales 2023 en Barcelona: toda la lista
Junts y Esquerra, gobierno de amplia mayoría en la Diputació de Girona
Una semana antes del pleno de investidura de Núria Marín, la Diputació de Girona ya tenía presidente: Miquel Noguer, alcalde de Banyoles. El primer concejal de la capital del Pla de l'Estany era reelegido en el cargo, después de que accediera a finales de 2018 por la renuncia de Pere Vila, nombrado delegado del Govern en la demarcación gerundense. Noguer contó con 21 votos favorables de los 27 que integran el pleno, siendo 11 de Junts, 9 de ERC y un de Independents de la Selva. El PSC y la CUP presentaron candidaturas alternativas. El órgano de gobierno de la Diputación, sin embargo, lo han acabado formando Junts y Esquerra Republicana, disponiendo de una mayoría muy amplia a lo largo del mandato.
De hecho, la Diputación gerundense ha sido, tradicionalmente, un feudo de Convergència. Desde 1979, todas las presidencias han estado en manos de CDC, con la excepción del mandato 2007-2011, cuando Esquerra Republicana lideró el ente. El año 2019, el grupo predominante ya se llamaba Junts per Catalunya. La distribución actual de los escaños ha sido de 11 para los juntaires, 9 para Esquerra, 4 para el PSC y los tres restantes han sido para la CUP, Independents de la Selva y Tots per l'Empordà.
El Pla de l'Estany, el Gironès o la Garrotxa son comarcas donde el independentismo cuenta con un amplio apoyo, y donde Junts llega a superar el 40% de los votos en algunas poblaciones. Factores como este explican la amplia presencia independentista en esta diputación, donde el partido judicial de Girona representa un tercio del plenario. En esta línea, los resultados en la capital del Gironès y en ciudades como Salt, Blanes, Figueres u Olot son muy relevantes.
📌 Candidatos a las elecciones municipales 2023 en Girona: toda la lista
La Diputació de Tarragona, el otro gran pacto de unidad independentista entre ERC y Junts
La Diputació de Tarragona también ha sido un ente tradicionalmente presidido por una persona de Convergència Democràtica de Catalunya. El fuerte crecimiento de Esquerra Republicana en la veguería de las Terres de l'Ebre dio pie a un hecho insólito hasta el momento: los republicanos se convertían en primera fuerza en la Diputació y, por primera vez, el órgano era encabezado por los republicanos y por una mujer fruto de un pacto con Junts. El anterior mandato, CDC había compartido gobierno con el PSC, pero después de los comicios del 28 de mayo de 2019, llegaba un acuerdo independentista en la provincia tarraconense. El 2 de julio, Noemí Llauradó, vicealcaldesa de Reus, era elegida presidenta de la Diputació de Tarragona con los 11 votos de su grupo y los 8 de Junts. Los otros dos grupos que forman el pleno son el PSC, con siete escaños y que votó en blanco en esta investidura, y Ciutadans, con un diputado, que se votó a sí mismo. Se trata de Rubén Viñuales, que dimitió a finales de 2020 por su fichaje por los socialistas. De hecho, Viñuales será el candidato del PSC a la alcaldía de Tarragona en estas elecciones municipales 2023.
En el caso de la Diputació de Tarragona, hay dos partidos judiciales con la misma preponderancia, Tarragona y Reus, que escogen a 7 diputados. Los resultados de estas dos ciudades apuntarán una cierta tendencia. En la capital tarraconense, se espera una pugna entre Viñuales y el actual alcalde, Pau Ricomà (ERC). En referencia a Reus, Teresa Pallarès asume el reto de revalidar la alcaldía para Junts (hasta ahora lo era Carles Pellicer) y tendrá a Noemí Llauradó —la presidenta de la Diputació— y Sandra Guaita (PSC) como principales contrincantes.
📌 Candidatos a las elecciones municipales 2023 en Tarragona: toda la lista
El gobierno de Esquerra y Junts en la Diputació de Lleida, el que suma más apoyo con 20 de los 25 escaños
La otra diputación donde Esquerra Republicana y Junts per Catalunya alcanzaron un acuerdo para gobernar juntos es la de Lleida. Los republicanos habían presidido la institución entre el 2007 y el 2011, pero después de las elecciones de 2019 volvían a recuperar el liderazgo. Joan Talarn, alcalde de Bellvís y els Arcs, fue investido como máximo responsable del órgano el 12 de julio de 2019, con los 11 votos de su grupo y los 9 de Junts per Catalunya. Los tres diputados del PSC votaron en blanco (sumando el de Unitat d'Aran), mientras que la diputada del Comú de Lleida y el de Ciutadans se votaron a ellos mismos. Este es uno de los acuerdos más sólidos entre los dos partidos independentistas, dado que ambos representan el 80% de la composición de la diputación leridana.
Entre los partidos judiciales que hay en Lleida, el que escoge más es el que lleva el nombre de la capital del Segrià, con 14 escaños de los 25 que hay. Por eso, tiene mucha importancia el resultado en la ciudad leridana, ya que con eso el PSC consiguió los dos escaños que tiene en la Diputació. En Lleida, la victoria se la pueden disputar, a priori, Miquel Pueyo (actual alcalde de ERC), Fèlix Larrosa (PSC) y Toni Postius (Junts). En otros puntos del territorio, el independentismo tiene mucha fuerza y es lo que explica que tanto los republicanos como los juntaires tengan un buen puñado de actas en el órgano.
📌 Candidatos a las elecciones municipales 2023 en Lleida: toda la lista
¿Cómo se configuran los plenos de las diputaciones?
La elección de los escaños en las diputaciones provinciales es indirecta, teniendo en consideración los resultados de las elecciones municipales. En paralelo, el número de diputados que hay en cada uno de estos órganos viene determinado por el número de residentes de la demarcación y se adjudica a partir de los partidos judiciales, división territorial que agrupa a una o más localidades de una comarca. En Catalunya, hay un total de 49 partidos judiciales: 25 en Barcelona, 9 en Girona, 8 en Tarragona y 7 en Lleida. Si quieres saber a qué partido judicial pertenece tu municipio, consúltalo en el buscador de este mapa:
El 3 de abril, se convocaron las elecciones municipales. Diez días después, las juntas electorales provinciales tienen que repartir proporcionalmente (a partir de la cuantía de habitantes que tiene) a los diputados de cada partido judicial. Una vez se constituyen los ayuntamientos de cada provincia, las juntas electorales de zona hacen el reparto de las actas de las diputaciones. El procedimiento que se sigue es la elaboración de una lista de todas las candidaturas que han conseguido, como mínimo, un concejal dentro del partido judicial en orden decreciente de los votos conseguidos. El siguiente paso es repartir los escaños de cada partido judicial a las formaciones políticas siguiendo la ley de Hondt. Dentro de los cinco días siguientes a esta asignación, las juntas electorales de zona convocan a los concejales de las candidaturas que tengan asignados escaños para escoger, entre las listas de candidatos que cuentan con el aval del 33% o más de concejales, los diputados y tres suplentes más.
En este mandato 2019-2023, la Diputació de Barcelona ha repartido a sus 51 diputados entre los siguientes partidos judiciales: Barcelona (18), l'Hospitalet de Llobregat (6), Sabadell (4), Terrassa (4), Granollers (3), Mataró (3), Sant Feliu de Llobregat (3), Manresa (2), Arenys de Mar (2), Vic (2), Berga (1), Igualada (1), Vilafranca del Penedès (1) y Vilanova i la Geltrú (1). Los 27 de Girona se ha repartido entre Girona (9), Santa Coloma de Farners (6), la Bisbal d'Empordà (5), Figueres (4), Olot (2) y Puigcerdà (1). En el caso de los 27 escaños de Tarragona, el reparto ha sido de la siguiente manera: Tarragona (7), Reus (7), Tortosa (5), el Vendrell (5) y Valls (3). Finalmente, en Lleida, los 25 representantes provienen de los partidos judiciales de Lleida (14), Balaguer (3), Cervera (3), Tremp (2), la Seu d'Urgell (1), Solsona (1) y Vielha e Mijaran (1). Aunque haya 49 partidos judiciales, las diputaciones toman como referencia los que había en las primeras elecciones locales después de la Transición, las de 1979.