Convergència recurrirá "formalmente" la apertura del juicio oral contra el expresident Artur Mas, la exconsellera Irene Rigau y la exvicepresidenta Joana Ortega a raíz de la consulta del 9-N, argumentando "persecución política contra el independentismo".

La portavoz del partido, Marta Pascal, ha reclamando la "nulidad de todo el procedimiento" porque hay un "clarísimo objetivo político por encima de cualquier objetivo judicial".

Por lo se refiere a las conversaciones que se han filtrado entre el ministro de Interior en funciones, Jorge Fernández Díaz, y el director de la Oficina Antifraude, Daniel de Alfonso, y donde se demuestra la guerra sucia del Estado contra el proceso independentista y las formaciones que lo impulsan, Convergència ha anunciado que presentará una querella ante el Tribunal Supremo.

Esta querella se tramitará la próxima semana y se hará extensiva a todas las personas que puedan verse implicadas.

Convergència considera "muy grave" que el ministro no tenga que dar explicaciones ante la diputación permanente del Congreso de diputados gracias al voto de PP, PSOE y Ciudadanos, que han rechazado la petición.