El Congreso de los Diputados ha rechazado este martes una moción de la CUP que reclamaba al ejecutivo español que colabore con la justicia para determinar el origen de la filtración del sumario de la Operación Judas contra los CDR, así como la creación en el Congreso de una comisión de investigación sobre aquella operación policial. El texto será votado este jueves, pero por las posiciones anunciadas naufragará.

La CUP también reclamaba que la cámara se pronunciara por la liberación de los manifestantes que a raíz de las protestas posteriores a la sentencia del Supremo siguen encarcelados, así como que se retiren las medallas a los policías que actuó el 1-O y la erradicación de las escopetas de balas de goma. También que se aclaren los intentos de infiltración de la policía en los movimientos independentistas, que se revise las "torturas" de la policía y que se derogue la 'Ley mordaza digital'.

Según Albert Botran, con esta moción la CUP quiere denunciar que se considera el independentismo como un "enemigo interno a abatir". "Que los cuerpos policiales actúen con agresividad y encubriendo los abusos es un problema para el conjunto de la sociedad en el Estado español. Unos cuerpos policiales descontrolados son el germen del fascismo", ha dicho.

El diputado de la CUP ha denunciado que se haya destituido al coronel De los Cobos no por los casos de tortura en Euskal Herria ni por las cargas en Catalunya, sino cuando ha afectado al gobierno del PSOE.

La CUP ha obtenido el apoyo de Bildu, BNG y JxCat. Unidas Podemos ha expresado su oposición a la iniciativa aduciendo que en Catalunya no hay persecución de la disidencia política. El diputado de Podemos Roberto Uriarte ha afirmado que aunque su formación está de acuerdo con cuestiones planteadas por la CUP, la moción "tiene problemas serios" porque renuncia al diálogo, cosa que lleva a una vía "estéril".

Por el contrario, Vox, PP, Cs y PSOE han acusado a la CUP de hacer una intervención injusta y sectaria. El diputado del PSC Marc Lamuà ha afirmado que España es "un estado democrático" donde "no se persigue a la disidencia" y donde "el desacuerdo se expresa democráticamente".