La mayoría de grupos parlamentarios del Congreso de los Diputados admitían antes del debate que habrían tumbado la obligatoriedad de la mascarilla en espacios exteriores. Aseguraban que no tenía ningún tipo. A la hora de la verdad, sin embargo, se ha acabado produciendo un avalancha de abstenciones --incluyendo ERC, Junts, el PDeCAT y la CUP-- que han permitido que la medida se mantenga vigente y no decaiga. No se ha escapado de la polémica: si eso ha salido adelante es porque, en el mismo real decreto, el Gobierno había colado una medida para las pensiones. Los aliados del ejecutivo central no se han ahorrado las críticas, pero han decidido no tumbarlo para no perjudicar a los pensionistas.

Esta medida fue anunciada por el mismo Pedro Sánchez en una reunión telemática de la conferencia de presidentes el pasado 22 de diciembre, y fue aprobada por el Consejo de Ministros al día siguiente mismo. Fue la única restricción común en el conjunto del Estado de cara a las fiestas de Navidad, y básicamente restablecía el uso de la mascarilla en todo espacio exterior, con dos únicas excepciones: zonas naturales (siempre que haya distancia de seguridad) y para la práctica de deporte individual. El dirigente socialista argumentó que la medida "se basaba en la experiencia", y esta obligatoriedad continuará vigente hasta nueva orden.

El mismo decreto incorporaba la revalorización de las pensiones, la llamada "paguita" compensatoria para los pensiones más bajas. La norma aprobada el pasado diciembre también permitía recuperar a los médicos jubilados para el sistema sanitario para hacer frente a la sexta ola de covid. No se puede votar de forma separada. Eso ha hecho que la mayoría de grupos se tapen la nariz y validen la convalidación. Las mismas fuerzas independentistas lo han criticado pero han acabado optando por la abstención en la votación de este martes por la tarde, desde ERC y Junts hasta el PDeCAT y la CUP. También se ha abstenido EH Bildu, mientras el PNV y el BNG han votador a favor. El marcador final: 162 votos a favor, 153 en contra y 28 abstenciones. Eso sí, será tramitado como proyecto de ley.

El diputado de ERC, Xavier Eritja, ha denunciado el "puro filibusterismo", incluyendo un tema de pensiones que "no tiene nada que ver con la materia". También ha criticado que la mascarilla se imponga con carácter generalista en todo el Estado español, dejando atrás la "cogobernanza". En la misma línea se ha expresado Concepció Cañadell, del PDeCAT: “Nos molesta mucho que el gobierno nos haya sometido a este chantaje. Señora ministra, así no”. Lo ha calificado de "trilerismo" y ha justificado su abstención: "Nuestro sentido de la responsabilidad nos imposibilita votar en contra".

También desde la derecha se ha criticado, y han votado en contra tanto el PP y Ciudadanos como la extrema derecha de Vox. La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, se ha preguntado en Twitter "con qué criterio decide el Gobierno que seguimos manteniendo las mascarillas al aire libre en estos momentos".