Los comuns dan un golpe sobre la mesa. La actitud del Govern de la Generalitat a la hora de negociar las cuentas no ha gustado a los de Jéssica Albiach. De hecho, la líder del partido ha recriminado la "lentitud y pasividad" del ejecutivo en esta materia, y que ya ha significado una prórroga técnica de las cuentas, que no llegarán el 1 de enero, y una negociación con el resto de grupos parlamentarios que ha avanzado poco en las últimas semanas. Todo eso, pese a que los comuns se han ofrecido reiteradamente en Pere Aragonès con el fin de reunirse y cerrar un acuerdo el más bien posible. Ahora, ante la negativa del ejecutivo, los lilas pasan a la ofensiva. "Movemos ficha con un contenido propio y propuestas para actuar contra el aumento del coste de la vida y la emergencia climática", ha anunciado Albiach.

Y es que los comuns han decidido que ha llegado la hora de tomar la iniciativa ante las deficiencias del ejecutivo. Este viernes, el partido se reunirá con el Govern, un encuentro que servirá para empezar el diálogo serio en esta materia, después de dos reuniones que consideran tan solo "exploratorias". "Mañana, por primera vez, nos sentaremos a negociar con las propuestas y el contenido que nosotros aportaremos", ha asegurado Albiach. Un programa propio, bajo el lema 'Tenemos un plan', con siete ejes principales que servirá como "base" para la negociación de las cuentas, y que tienen un objetivo claro: proteger las clases medias y trabajadoras del país del impacto directo de la crisis. "Ante un Govern sin rumbo propio, errático, tenemos un plan para las próximas generaciones", ha advertido la líder de los comuns, añadiendo que los presupuestos solo tienen que ser uno primer paso para avanzar hacia una Catalunya solidaria, soberana, en que la vivienda sea un derecho, y en que la sanidad y la educación no acaben en manos privadas.

Albiach no ha desperdiciado, pues, la oportunidad para criticar la actitud del ejecutivo, y lanzando un aviso contundente. "El Govern en minoría no puede seguir actuando como si fuera un Govern de coalición. Se ha acabado la excusa de Junts", mientras que también ha avisado de que Aragonès no puede dar por hecho el apoyo de los comuns a las cuentas. "No daremos un cheque en blanco". Por su parte, el diputado de los lilas Juan Carlos Gallego ha remarcado que ellos quieren unos presupuestos "orientados a la izquierda" y que están dispuestos a arremangarse para conseguirlos. "Ahora hay que ver si el Govern está dispuesto a hacerlo. Si arrastran los pies, lo tendremos mal", ha lamentado, señalando que será importante llegar a un acuerdo a mediados de diciembre, como mucho, para evitar una prórroga definitiva.

Siete líneas estratégicas

En su programa propio que los comuns ya han enviado al equipo negociar del Govern, hay siete puntos básicos: un escudo social de 1.000 millones de euros contra la crisis económica e inflacionaria, avanzar en la soberanía energética, hacer posible el acceso a la vivienda, convertir Catalunya en "un país de trenes", proteger la sanidad pública y la educación pública, y alcanzar una solidaridad fiscal. Entre otras medidas concretas, los de Jéssica Albiach quieren incrementar el impuesto de patrimonio e incorporar para los grandes barcos y las actividades económicas que generan gases de efecto invernadero. También reclaman avances en la reducción del tiempo de espera en los centros sanitarios, crear unidades antidesahucios en colaboración con los ayuntamientos de más de 20.000 habitantes, recuperar los 32.800 pisos vacíos en manos de la banca y fondos buitres, ampliar en 5.000 el parque de viviendas públicas, erradicar el sinhogarismo, incorporar servicios de alta velocidad entre Barcelona y otras ciudades de la región, e implantar placas solares en hogares vulnerables y en comunidades de vecinos.