Pedro Sánchez se afianza y hace grande la distancia con Alberto Núñez Feijóo. El PSOE sería la lista más votada con el 32,7% de los votos, mientras que el PP descendería hasta el 28%. A ambos les separan casi 5 puntos porcentuales. Es la principal conclusión del barómetro de marzo del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) que se ha publicado este viernes y que derriba a Unidas Podemos por detrás de Vox. Los morados caerían hasta el 10% de los votos y quedarían por detrás de la ultraderecha, que alcanzaría el 10,1% en intención de voto. El bloque independentista catalán recupera bastante gracias a la subida de Esquerra.

El pronóstico se hizo en medio de la tormenta política que provocó el caso Mediador y sus implicaciones hacia el grupo socialista en el Congreso de los Diputados que se saldó la expulsión del diputado Juan Bernardo Fuentes Curbelo, conocido como Tito Berni. Para poner contexto, las encuestas también se hicieron en el marco de la crisis a la coalición de gobierno entre la parte socialista y la parte morada por culpa de la reforma de la ley del solo sí es sí. Los socialistas aprobaron con el PP la modificación de la norma estrella de la ministra de Igualdad, Irene Montero. Analizando los resultados del sondeo, la formación de Yolanda Díaz es la que paga el pato de la tormenta política y social suscitada por la rebaja de condenas a agresores sexuales. El CIS da un respiro a Ciudadanos, que suma cuatro décimas hasta el 2,4%, lo que le permite mantener la aspiración de obtener representación en el Congreso.

Entrando al cara a cara entre Sánchez y Feijóo, el 31,9% de los españoles tiene “mucha” o “bastante confianza” hacia el presidente español. En el caso del líder del PP la proporción baja al 26,4%. En cambio, a un 66,5% de los preguntados el secretario general del PSOE les inspira “poca” o “ninguna confianza” mientras que al gallego le pasa con el 71,5%. En la lista de líderes, todos suspenden, aunque Yolanda Díaz es la que saca mejor nota (4,89) por delante de Pedro Sánchez (4,41), Núñez Feijóo (4,28), Íñigo Errejón (4,10), Inés Arrimadas (3,39) y Santiago Abascal (2,68).

En conjunto, el bloque independentista en el Congreso supera los registros de la anterior oleada, pasando del 3,6% en estimación de voto al 4,1%. La subida se explica por el aumento en el pronóstico de Esquerra, que sube medio punto porcentual y se sitúa en el 2,5% de los apoyos. Junts per Catalunya y la CUP se mantienen en el mismo nivel, 1,1% y 0,5%, respectivamente. En Euskadi se vuelven a girar las tornas y el PNB (1,1%) recupera el liderazgo ante Bildu, que baja al 0,7% después de que en el sondeo de febrero los abertzales consiguieron el sorpasso.

La pugna entre el PSOE y el PP

En el anterior barómetro, el PSOE aumentó la ventaja respecto del Partido Popular y, en estimación de voto, los socialistas subieron casi dos puntos, llegando al 32,1%, mientras que los conservadores también llegaron hasta el 29,5% (+1,4 sobre la encuesta de enero). En febrero, a Pedro Sánchez y a Alberto Núñez Feijóo los separaban dos puntos porcentuales, mientras que en enero la diferencia era de 1,7% entre uno y el otro. De aquella encuesta, el principal perjudicado era Unidas Podemos, que bajó hasta el 12,7% (-1,5% respecto de enero), Vox se mantuvo en el umbral del 10% y Ciudadanos bajó al 2%. El contexto del anterior barómetro era la pugna entre los socios de coalición por la reforma del solo sí es sí.

Hace un mes, el independentismo en el Congreso retrocedió. En conjunto, Esquerra Republicana, Junts per Catalunya y la CUP dieron un paso atrás, bajaron un punto y, en conjunto, se situaron en el 3,3% en intención de voto. Los de Gabriel Rufián se quedaron en el 2% de los votos (-0,2% respecto de enero), los de Míriam Nogueras bajaron hasta el 0,8% (-0,6%) y los anticapitalistas también perdieron dos décimas hasta el 0,5%. Con respecto al resto de partidos, había que destacar el sorpasso de Bildu al Partido Nacionalista Vasco (PNV) después de que empataran en el barómetro de enero. Según los cálculos del CIS, los abertzales consiguieron el 1,1% de los apoyos frente al 0,8% de los jeltzales.