Catalunya está al frente de los países que menos reclaman medidas contra la inmigración, según publica el semanario alemán Die Zeit, que hace mención de un estudio que ha hecho en colaboración con la Comisión Europea en base a los resultados de las elecciones europeas de 2019 en 80.000 euroregiones. El estudio analiza el porcentaje de votos de los partidos que tienen una actitud restrictiva con la inmigración, y los resultados de Catalunya contrastan visiblemente con el tono general que está adquiriendo Europa.

En el caso catalán, las elecciones europeas del 2019 las ganó Carles Puigdemont (JuntsxEuropa), seguido de Josep Borrell (PSOE) y Oriol Junqueras (ERC).

Al lado de Catalunya también mantienen posiciones especialmente abiertas sobre la inmigración zonas como el País Vasco, el sur de Portugal, Escocia y Valonia, así como el Tirol del Sud. El conjunto de España se mantiene en una zona intermedia a punto de pasar ya al rojo, que ya empieza a ser evidente en algunas zonas de Castilla.

Los países más hostiles a la inmigración son Italia y Francia, y especialmente los que pertenecían a la órbita soviética. También está creciendo esta tendencia en Suecia.

Según el estudio, las personas que tienen una actitud negativa hacia la inmigración "también tienden a ser más euroescépticas". Y añade que las personas con más nivel educativo, los estudiantes y los jóvenes, así como los que no están en el paro, tienden a confiar en la UE. Añade que el rechazo a la inmigración no siempre va asociado a un alto número de inmigrantes, sino a factores como el envejecimiento de la población, problemas de educación y los ingresos bajos.