Ya ha rodado una cabeza, la de Paz Esteban como directora del CNI. Pero ha tenido más que ver con el caso Pegasus en el Gobierno que con el CatalanGate. De hecho, la ministra Margarita Robles, encargada de comunicar públicamente el cese, ha vuelto a defender este martes el espionaje practicado por los servicios de inteligencia a dirigentes independentistas, como reveló la misma Esteban en la comisión de secretos oficiales la semana pasada. La titular de Defensa ha asegurado que las autorizaciones judiciales "estaban absolutamente motivadas". E incluso ha desafiado a las fuerzas catalanas, asegurando que con la desclasificación de los documentos "a lo mejor se aclararían muchas cosas" de lo que pasó, muy probablemente en referencia a las protestas contra la sentencia del procés el otoño de 2019. La dirigente socialista ha descartado dimitir y ha presumido del apoyo de Pedro Sánchez.
De hecho, Margarita Robles se resistía a entregar la cabeza de Paz Esteban. Hoy le ha tocado comunicar la decisión en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, después del informe del Centro Criptológico Nacional. Ha rebatido incluso el término, en respuesta a un periodista: "Usted habla de destitución; yo le diría sustitución por otra funcionaria del Centro". En este sentido, ha tenido elogios para la decapitada Paz Esteban y ha relativizado los hechos, asegurando que "en este mundo vivimos ciberataques" y que "hay deficiencias y fallos en todas partes", no sólo en España. Ha reiterado su "orgullo por todos los servidores públicos" del Estado.
Y también ha querido hacer algunas precisiones cuando le han preguntado por el espionaje al independentismo. La ministra de Defensa ha reiterado que la directora del CNI pudo acudir a la comisión de secretos oficiales y pudo dejar claro que "todas las actuaciones del CNI son siempre con arreglo a derecho y con autorización judicial". En este sentido, ha añadido que "por suerte en este país los jueces motivan y explican por qué se toman las decisiones". Y ha remachado: "En este país no se investiga a nadie por sus ideas políticas. Estas autorizaciones judiciales estaban absolutamente motivadas". Robles ha hecho eses para poder hablar del contenido de la comisión de secretos oficiales a pesar del carácter de secreto oficial.
Lo ha enlazado con las peticiones de desclasificación de documentos que reclaman tanto el independentismo como Unidas Podemos. La ministra de Defensa ha asegurado que ella estaría "encantada" personalmente con la desclasificación, para que "se pudiera ver todo" y para que "a lo mejor así se aclararían muchas cosas". Ha reiterado que en España no se persigue ninguna ideología política.
Mientras, sigue pendiente de concretar la reunión entre los presidentes Pedro Sánchez y Pere Aragonès, que acordaron el pasado viernes. No hay ni día ni lugar. Lo que sí ha trascendido es que el presidente del Gobierno comparecerá ante el pleno del Congreso la última semana de mayo para dar explicaciones del CatalanGate y el espionaje con Pegasus.
El cese no satisface al independentismo
Ya lo había advertido durante las últimas horas, y se ha confirmado este mismo martes: el independentismo no tiene bastante con la cabeza de Paz Esteban como directora del Centro Nacional de Inteligencia. Los partidos catalanes, desde ERC y Junts hasta el PDeCAT y la CUP, siguen apuntando más arriba, hacia la ministra Margarita Robles, en tanto que máxima responsable política de los servicios de inteligencia españoles, que estaban detrás del CatalanGate. Mientras tanto, Unidas Podemos ya evita poner el nombre de la titular de Defensa encima de la mesa en depuración de responsabilidades. Pero también avisan de que es insuficiente y que hay que llegar hasta el final para no cerrar la crisis del espionaje "en falso".