Muchos hombres con trajes de negro y un punto de color, la única mujer entre ellos. Este patrón se repite en innumerable fotografías de dirigentes mundiales en cumbres, conferencias o reuniones. La representación masculina en las esferas de poder supera la femenina, a diferencia de lo que sucede en la sociedad. Varias mujeres y hombres han denunciado esta situación y han optado por una estrategia u otra para no seguir participando de esta dinámica d'infrarepresentación. Ahora, la vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Nadia Calviño, ha tomado una decisión: "No volveré a hacerme una fotografía en que esté la única mujer, no volveré a hacerlo".

La decisión de la ministra no se queda solo en la representación gráfica, ha añadido: "No volveré a participar en un debate en que esté la única mujer". Calviño ha expuesto su voluntad de dejar de participar de ser metida como la mujer, una cuota. "Son muchos los acontecimientos en que soy la única mujer, porque soy la ministra y no podemos seguir considerando normal que no esté presente el 50% de la población", ha lamentado en el marco de unas jornadas organizadas por la compañía Hill+Knowlton. Calvinño ha celebrado la paridad en el acontecimiento y ha advertido de los peligros de no promoverla: "El riesgo que tenemos de involución, de perder el foco de uno de los vectores de modernidad, transformación y progreso de nuestro país desde que llegó la democracia es muy elevado". La ministra ha defendido que se tiene que promover la agenda feminista en el seno de las empresas.

Agenda feminista compartida

Nadia Calviños no es la única integrante del Gobierno que ha tratado la agenda feminista. En la reunión que tuvieron la ministra de Igualdad, Irene Montero, y la consellera de Igualdad y Feminismos, Tània Verge hace dos semanas, acordaron trabajar "bilateralmente para avanzar en la agenda feminista compartida". Con el fin de hacer un seguimiento de esta colaboración las dos se emplazaron a celebrar una nueva reunión antes del verano. "Caminamos juntas en la lucha por los derechos de las mujeres en Catalunya y España, contra las violencias machistas, por los derechos LGTBI y con el plan Corresponsables", aseguró a Montero.

Entre los temas que trató durante la reunión se encuentra la Estrategia Nacional de Derechos Sexuales y Reproductivos y las políticas que tienen que garantizar los derechos de las personas LGTBI, así como la futura ley trans catalana y la ley antirracista. Sobre la Estrategia de Derechos Sexuales y Reproductivos la consellera Verge destacó a la ministra que se trata de un plan que "profundizará en los derechos ya conseguidos" e integrará nuevos, como el derecho a la equidad menstrual. Una de las demandas que Verge remarcó fue la importancia de que el precio de los productos menstruales no tenga IVA: "Es claramente un impuesto discriminatorio para más de la mitad de la población"