Momento de incómoda tensión este martes en la localidad zamorana de Galende durante la visita de los reyes Felipe VI y Letizia con motivo de los graves incendios que asolan la región castellanoleonesa de Sanabria. Los bomberos forestales han negado el saludo al presidente de Castilla y León, el popular Alfonso Fernández Mañueco, que acompañaba a los monarcas durante la visita. Cuando Mañueco se ha acercado, detrás de la reina y felicitando el "buen trabajo", los bomberos se han mantenido quietos, sin darle la mano. La reina intenta propiciar el saludo entre el dirigente del PP y los bomberos, sin éxito. Resignado, el presidente autonómico ha seguido a la comitiva alejándose a cierta distancia, mientras uno de los brigadistas le ha increpado directamente mirándole a los ojos: "¿Somos un puto despilfarro?".
El reproche evidencia el malestar de los bomberos con la gestión del gobierno del presidente Fernández Mañueco mientras Castilla y León sufre hasta 25 incendios activos, algunos de ellos aún sin control, que han calcinado más de 140.000 hectáreas y en los que han fallecido tres personas. La comunidad está en situación de alerta generalizada durante estos días, mientras que los fuegos están siendo azuzados por el viento y la vegetación seca. En total, 18 poblaciones de las provincias de León y Zamora han sido desalojadas, mientras que otros 16 pueblos están confinados, afectando a unos 2.000 habitantes de estas zonas rurales. Trabajan efectivos de la Unidad Militar de Emergencia y dotaciones de bomberos, médicos y trabajadores de emergencias cedidos por Illes Balears, La Rioja o el País Vasco.
La polémica que ha desencadenado el reproche del bombero a Mañueco surge a raíz su consejero de Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, de quien se han viralizado unas declaraciones que hizo en 2018 asegurando que "mantener el operativo de incendios todo el año es absurdo y un despilfarro". Así, el gobierno castellanoleonés justificaba sus recortes en materia de política forestal, una gestión criticada por los trabajadores de emergencias. No solo eso, sino que el polémico consejero de Mañueco ha sido también criticado recientemente por su ausencia durante la gestión de los incendios. De hecho, cuando fue visto en la Feria Gastronómica de Gijón ironizó afirmando que tiene "la mala costumbre de comer", lo que generó una oleada de rechazo pidiendo su dimisión.
Mañueco se tiene que apartar porque los trabajadores, a los que precariza y no dota de medios suficientes, le niegan el saludo. pic.twitter.com/X8eheMgIuz
— Javier García Martín (@javiergmart) August 27, 2025
Protestas contra Mañueco
Ante las críticas, Mañueco ha defendido durante estas semanas su gestión de los incendios, si bien ha admitido "incidencias" en aspectos como no haber utilizado algunos de los recursos facilitados por el Gobierno, a la vez que exigía a Pedro Sánchez más medios. La Junta, de hecho, dejó sin utilizar una base logística en la localidad leonesa de Cistierna con capacidad para 180 personas y equipada con recursos para los equipos de extinción. "Todos los medios disponibles se aprovechan al máximo cuando lo aconsejan las circunstancias", defendió Mañueco, que justificó que respondía a las "condiciones cambiantes" del fuego.
Otra cuestión criticada al gobierno castellanoleonés ha sido que no movilizó al personal técnico, que estaba de vacaciones, hasta ocho días después del inicio de los incendios. También se le ha criticado precariedad en los recursos, dado que se ha externalizado la contratación de peones forestales y las empresas adjudicatarias no pedían experiencia a los candidatos. Paralelamente a los incendios, se han producido protestas estos días en localidades como Valladolid, León, Soria, Burgos o La Bañeza exigiendo la dimisión de Mañueco y Suárez-Quiñones por todas estas polémicas, denunciando lo que consideran una falta de preparación pese a que ya hubo graves incendios en la comunidad en 2022.