EH Bildu no se mueve de su posición. Después de reunirse este lunes por la mañana, la Mesa Política de la formación abertzale ha tomado dos decisiones. La primera, convocar este jueves una asamblea general extraordinaria para analizar la posición ante los presupuestos generales del Estado. La segunda, hacer en esta asamblea una propuesta a ratificar: que los cinco diputados de EH Bildu en el Congreso voten favorablemente las nuevas cuentas públicas. Lo ha anunciado el coordinador general de la formación, Arnaldo Otegi, en rueda de prensa este mediodía.

Para justificar su posicionamiento ante los presupuestos del Estado, el coordinador general de EH Bildu ha defendido que "estamos aquí para defender los derechos de la gente y para evitar que la derecha gobierne en el Estado o en Euskadi". Por eso la propuesta que harán a sus bases, que tendrán la última palabra. Tendrán que ratificar o tumbar la siguiente propuesta: que sus diputados aprieten el botón del 'sí' en la cámara baja a finales de mes.

Otegi no ha asegurado que haya acuerdo con el Gobierno, sino que las conversaciones continúan. Lo que sí que ha negado es que haya ningún tipo de contrapartida con acercamiento de presos de ETA a cárceles vascas. "La repatriación de los presos a nuestro país no es objeto de negociación, sino el cumplimiento de la legislación penitenciaria", ha sostenido. Ha recordado que "si existe acercamiento de presos es porque alguien decidió que hubiera alejamiento, totalmente contrario a la legislación penitenciaria.

El apoyo de EH Bildu, adelantado por el mismo Otegi y agradecido por el vicepresidente Pablo Iglesias a minutos del debate de las enmiendas a la totalidad, ha vuelto a encender el debate durante las últimas semanas. La derecha ha recuperado el "todo es ETA" y ha acusado a La Moncloa de pactos ocultos con la izquierda abertzale, que el PP, Vox y Ciudadanos señalan como "los herederos de ETA". También han saltado los barones socialistas y exdirigentes del PSOE habituales.

Sánchez lo defiende

Pedro Sánchez se vio obligado el pasado jueves a contrarrestar estas críticas. En una carta dirigida a la militancia socialista, el presidente español defendió su voluntad de extender la alianza del PSOE y Unidas Podemos "sin excluir a nadie" de esta ecuación. "Todos los apoyos son precisos en un momento en el que tenemos que unirnos para proteger vidas y puestos de trabajo y para recuperar nuestra economía", sostenía en la misiva. El resto son "polémicas artificiales". Eso sí, en ningún momento se refirió explícitamente a la formación de Arnaldo Otegi.