El PSOE se ha visto literalmente barrido en Andalucía, un territorio que había sido su histórico feudo electoral y donde esta noche ha quedado por debajo de la barrera del millón de votos. La noche electoral ha resultado tan desastrosa para el PSOE que la formación socialista, con los 30 escaños que ha sumado, no ha conseguido ni tan sólo retener a los 33 diputados conseguidos por Susana Díaz en los últimos comicios. Mientras el PP ha conseguido la mayoría absoluta y ha ganado en todas las provincias, el PSOE no ha conseguido ni tan sólo retener la provincia de Sevilla, un territorio donde nunca había sido abatido en ninguna convocatoria a urnas.

Todas las miradas se giraban esta noche hacia la Moncloa, después de que el candidato socialista Juan Espadas era la apuesta personal de Pedro Sánchez para pasar página a la etapa de Susana Díaz. El revés de Andalucía viene, además, a sumarse al fracaso registrado el pasado mes de febrero en Castilla y León y al batacazo en Madrid de mayo del 2021. Desde la sede de Ferraz ya desde primera hora de la noche se ha optado por subrayar que estas eran unas elecciones autonómicas que no tendrían efecto a nivel estatal. Pedro Sánchez ha seguido los resultados desde la Moncloa, mientras que en la sede electoral ha seguido el escrutinio la cúpula de la formación y diferente ministros.

La vicesecretaria general, Adriana Lastra, ha salido a valorar los resultados en la sede del PSOE en una comparecencia sin preguntas donde ha querido limitar el revés recibido esta noche asegurando que los socialistas "siguen liderando las encuestas nacionales".

Sin embargo, la formación socialista confiaba que esta noche el PP quedara en manos de Vox en Andalucía y pusiera en riesgo la estrategia de moderación de Albertot Núñez Feijoo, y ha tenido que contemplar un escenario bien diferente: El PP no sólo ha engullido los votos socialistas que hace cuatro años fueron a Cs, sino que, además, el popular Juan Manuel Moreno Bonilla también ha conseguido pescar entre el electorado que en las última elecciones voto a Susana Díaz.

Oposición útil

Espadas ha comparecido antes de las 11 de la noche para anunciar que desde mañana será jefe de la oposición y que allí estará durando los próximos cuatro años. Ha asegurado que la suya será "una oposición útil, de Estado, contundente y eficaz". A pesar del descalabro no ha habido autocrítica en su intervención, ha atribuido el resultado al hecho de que no se ha conseguido la movilización que había reclamado. "Cuando la participación es baja es la izquierda la que acostumbra a sufrir. Sin la movilización de la izquierda es difícil parar a la derecha", ha remachado.

Espadas ha reprochado que la campaña ha sido "muy difícil y desigual", con sólo 7 meses para articular un proyecto, y enfrentándose al candidato del PP al cual ha acusado de haber usado "la maquinaria del gobierno" en su campaña.

Sevilla, imagen del fracaso

El giro histórico que ha vivido Andalucía esta noche ha dejado al PSOE con el peor resultado que ha obtenido en 40 años de elecciones autonómicas. Los socialistas han perdido dos escaños en relación a los comicios de 2018, cuando Susana Díaz a pesar de ganar los comicios ya se cayó en el peor registro hasta entonces y no pudo gobernar. Espadas, además, ha perdido más de 120.000 votos, ha quedado por primera vez por debajo del millón y no ha conseguido la mayoría en ninguna de las provincias.

Sevilla se ha convertido esta noche en la imagen del fracaso del PSOE y una de las circunscripciones donde ha perdido escaños. El PP, con 9 diputados, ha conseguido triplicar los escaños que tenía, mientras la lista socialista ha perdido a uno y se ha quedado con 5 diputados. En esta circunscripción, el PSOE ha perdido en municipios emblemáticos como la ciudad de Sevilla, donde el candidato del PSOE fue alcalde, o Dos Hermanas, donde el PP ha conseguido triplicar el resultado del 2018.