Decenas de vecinos de Badalona han recibido con gritos, lazos amarillos, pancartas y narices de payaso al delegado del gobierno español en Catalunya, Enric Millo, que este viernes presidía la apertura del yacimiento romano de la Casa de l'Heura, que se ha rehabilitado con fondos del Estado.

La importante presencia de manifestantes ha obligado a intervenir a los Mossos d'Esquadra, que entre empujones han abierto un cordón para facilitar el acceso de las autoridades al recinto. Este acto no ha contado con la presencia de ningún representante del gobierno municipal, después de que la alcaldesa anunciara que no asistiría como muestra rechazo al 155.

Millo ha tachado a la alcaldesa y a los vecinos que lo han recibido a gritos de "intolerantes", y ha denunciado que la actitud de estos "grupos minoritarios" sólo hace que "profundizar en la fractura social".