El pleno del Ayuntamiento de Barcelona ha rechazado este viernes la sentencia del juicio al procés porque considera que la vía penal "no ha sido el adecuada para resolver una cuestión de carácter político". La proposición, acordada entre ERC y JxCat y transaccionada con BComú, considera que se ha hecho un juicio "político" y "sin las garantías exigibles" y cree que la condena es "contra toda la ciudadanía". Además, el texto exige la libertad "inmediata" de los presos y las presas "políticos" y el retorno de "las personas exiliadas". El PSC, Cs, el PP y Barcelona pel Cambio han votado en contra.

Los grupos que han votado a favor -ERC, JxCat y BComú- denuncian en el tercero y el cuarto punto del texto la "regresión de derechos y libertades" y se comprometen a trabajar conjuntamente con el resto de instituciones y sociedad civil para encontrar "soluciones" para la liberación de los presos.

El quinto punto de la proposición recopilación que la resolución del conflicto político se tiene que canalizar "a través de las vías democráticas, el diálogo institucional y la expresión democrática de la voluntad de la ciudadanía". "Reconocemos que Catalunya tiene derecho a la autodeterminación", reza este punto.

Movilización pacífica

El sexto punto constata que la ciudadanía pueda movilizarse contra la sentencia y a favor de derechos y libertades "de manera pacífica y en firme defensa de los valores democráticos". También se expresa el "rechazo absoluto" a cualquier forma de violencia.

Por último, se acuerda trasladar el contenido de la proposición a las instituciones catalanas y españolas, así como en las instancias internacionales en las cuales participa Barcelona.

Acuerdo firme

Durante la votación, el concejal de ERC Ernest Maragall ha celebrado que haya un "acuerdo firme" para el rechazo a la sentencia, la liberación de los presos y para que los ciudadanos voten en un referéndum de autodeterminación, un acuerdo que considera "de mínimos". Desde JxCat, Elsa Artadi ha criticado que la justicia española "ha demostrado mucho más ser española que justicia" y que se haya basado en una causa "inventada y juzgada" sin ninguna de las garantías.

División en el gobierno municipal

La votación de la proposición ha evidenciado una vez más las diferencias entre los dos partidos en el gobierno: BComú, que ha votado a favor, y el PSC, que se ha situado al lado del PP, Cs y Barcelona pel Canvi. El concejal de los comunes Jordi Martí ha considerado que era "indispensable" que el plenario manifestara su rechazo a la sentencia, por "injusta" pero también porque supone la judicialización de un conflicto "que era político" y ha hecho un llamamiento al diálogo. Martí, sin embargo, ha matizado que desde BComú no comparten "la estrategia actual del independentismo" y ha criticado la "ineficacia" y la "desorientación política" en Palau, en el otro lado de la plaza Sant Jaume.

Por el contrario, el primer teniente de alcaldía, Jaume Collboni, ha reconocido que aunque todas las sentencias son "opinables", en un estado de derecho hay "separación de poderes". En este sentido, el concejal socialista ha defendido que el juicio se ha realizado "en condiciones de máxima transparencia y garantizando el derecho de todas las partes".

Igual que el PSC, Cs, el PP y Barcelona por el Cambio han votado también en contra de la proposición.