La Audiencia Nacional no descarta que haya habido una "investigación prospectiva" contra la familia Pujol Ferrusola, pero, "analizará la operación Catalunya y la intervención de Vicky Álvarez" en sentencia. Así lo ha afirmado el presidente del tribunal, el magistrado Ricardo de Prada, este miércoles en el reinicio del juicio contra el expresident Jordi Pujol, sus siete hijos por la fortuna que tenían en Andorra y diez empresarios. “La sala no tiene suficientes elementos para emitir una resolución”, ha declarado el presidente del tribunal y ha desestimado pronunciarse sobre todas las cuestiones previas de las defensas. Es decir, la no-competencia de la Audiencia Nacional en favor de la Audiencia de Barcelona; la doble incriminación con Andorra; la nulidad de las entradas y la prescripción de los delitos de falsificación documental y contra Hacienda. 

No obstante, el tribunal ha aceptado que declaren como testigos cinco excargos policiales, pedidos por la defensa de Jordi Pujol Ferrusola, e inicialmente rechazados. Son: Eugenio Pino, entonces director adjunto Operativo de la policía española y único condenado por intentar incluir información obtenida ilegalmente de los Pujol  en la investigación judicial; el excomisario jubilado  José Manuel Villarejo, que ha confirmado la operación Catalunya dirigida por el gobierno del PP de Mariano Rajoy; los inspectores policiales Bonifacio Díez y Celestino Barroso, y  el entonces comisario jefe de Asuntos Internos Marcelino Martín-Blas. Todos ellos están imputados en Andorra por presionar a los titulares de la Banca Privada de Andorra (BPA) para obtener información de los Pujol y políticos catalanes.

"Tendrán que justificar y acotar mucho las preguntas", ha alertado De Prada a las defensas en el caso de los nuevos testigos. El tribunal, pero, ha descartado que se hagan comisiones rogatorias en Andorra y que se pida desclasificar información de la operación Cataluña al Consejo de Ministros por no atrasar el juicio y convertir la causa en otra causa. El fiscal y el abogado del Estado no se han opuesto a su declaración. El tribunal también ha aceptado que declare como testigo Jordi Pujol Gironès, pedido por la defensa Mercè Gironès, exmujer de Pujol Júnior e imputada en esta causa.

Vuelven al banco de acusados

Resuelto el trámite de cuestiones previas, el juicio ha continuado con el interrogatorio de los tres primeros testigos. Algunos de los hijos del president Pujo (Jordi, Pere y Oleguer) han vuelto a sentarse en el banquillo de los acusados de la Audiencia Nacional, en Madrid, a pesar de que el tribunal los dispensó de ir hasta que les toque declarar, el próximo mayo.

Pujol, de 95 años, pero no se conectará desde su domicilio en Barcelona -como se le ha permitido- hasta que el tribunal lo vuelva a llamar. El tribunal ha sido criticado para mantener el expresident de la Generalitat en el procedimiento penal, a pesar de que los forenses certificaron sus problemas de salud y cognitivos por su edad avanzada.