¿Existió un momento cerveza entre Artur Mas y Anna Gabriel? Esta es la pregunta que se hace todo el mundo después de que ayer saliera a la luz un avance de la entrevista de El Suplement de Catalunya Ràdio a la diputada de la CUP, en la que negó haber tomado nunca ninguna cerveza con el expresident de la Generalitat. También es la pregunta que ha generado cierta molestia dentro de Convergència por tratar a Mas de "mentiroso".

Preguntado el pasado 9 de marzo por Mònica Terribas por si invitaría a Gabriel a tomar una cerveza, Mas le respondió que "un día le explicaré eso de la cerveza, porque no fue una cerveza", y añadió que "fíjese, ya lo he hecho, y no una vez, y no en un bar".

De esta manera, parece quedar bastante claro por los dos lados que el líder de Convergència no tomó una cerveza con la diputada cupaire, pero sí que hubo contactos. "Yo con Anna Gabriel he tenido más de una, dos y tres conversaciones".

Nadie desmiente a nadie porque, de hecho, no se contradicen. Mientras Gabriel intenta justificar que "las cuatro reuniones que se produjeron fueron antes de la investidura", Mas en ningún momento pone de manifiesto que no fuera así.

Incluso, cuando explica que "no se rompieron los cristales de los vasos" y añade que "se mantuvieron la formalidad y las buenas formas en todo momento", asegura que "en algún momento, el contenido de la dialéctica no era fácil", declaración que lleva a pensar que estos encuentros se produjeron justo antes de que diera el paso al lado, el pasado 9 de enero.

"Mònica Terribas lo sorprendió con aquella pregunta porque él hizo un silencio inquietante, que él no acostumbra a hacer, es muy rápido en la respuesta", expone Gabriel un poco inquieta. Y aprovecha para dejar claro que después de la investidura, cuando saludó tanto a Mas como a Carles Puigdemont, no ha tenido "ninguna otra conversación por ningún medio". "No pasa nada por decir que no ha habido ningún contacto", sentencia.