El vicepresident del Govern y conseller de Economía y Hacienda, Pere Aragonès, ha afirmado este domingo que al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, "se le han acabado las excusas" para encontrar una "salida dialogada y democrática" al conflicto catalán y "empezar un diálogo que es inevitable".

En declaraciones desde el Aplec del Cargol, el vicepresident ha reaccionado así al hecho que en la clausura de la 35ª edición de las jornadas del Círculo de Economía de Sitges no se refiriera a la situación política catalana ni respondiera a la propuesta de que había hecho el vicepresident catalán el día antes delante del mismo auditorio de recuperar el Pacto de Pedralbes. Aragonès ha señalado que Sánchez tiene la "predisposición del independentismo catalán" y las "mayorías en el Congreso" y le ha reclamado "ir al grano".

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ACN

Aragonès ha recordado que en su intervención del viernes en el Círculo de Economía propuso recuperar el documento firmado en diciembre en el Palau de Pedralbes y que "da margen para empezar un diálogo que es inevitable". "Evidentemente nos tenemos que sentar en la mesa y hablar", ha insistido el vicepresidente, que al mismo tiempo ha dejado claro que el Govern no renunciará al objetivo final de la independencia porque "es el proyecto de futuro para este país".

El vicepresident también ha comentado que tendrá que ser el presidente español "quien gestione la decepción" de los empresarios después de que Sánchez no se refiriera a la situación política catalana.

Un "155 político"

Por otra parte, Aragonès ha lamentado que el "155 político sigue marcando el día a día" un año después de que se levantara el "155 formal" coincidiendo con la formación de un nuevo Gobierno. En este sentido, ha dicho que todavía se utiliza "para excluir diputados del Congreso y del Senado, los más votados de Catalunya, de sus responsabilidades o incluso como en algunos municipios crean cordón sanitario contra el independentismo", en referencia a la voluntad de Manuel Valls (Cs) de investir a Ada Colau (Barcelona En Comú) para que Ernest Maragall (ERC) no sea alcalde.

El vicepresident, sin embargo, ha sacado pecho asegurando que el Govern ha hecho frente a "muchos retos" en un contexto de prórroga presupuestaria, como por ejemplo la aprobación de una partida de 800 millones de euros para garantizar los servicios públicos. En este sentido, ha destacado que lo han hecho "solos" y "sin ayuda de cabeza de los grupos parlamentarios", con quién espera encontrar "salidas" una vez superados los dos ciclos electorales.

El vicepresident, sin embargo, ha añadido que el Ejecutivo "seguirá trabajando en los problemas que tiene sobre la mesa". "Los hemos ido resolviendo y seguiremos fomentando el diálogo y la negociación como la salida de todos los conflictos y de todas las controversias, dentro de Catalunya pero también de cara al Estado", ha añadido Pere Aragonès.

Aragonès también ha querido citar otras medidas que ha tomado el Govern últimamente, como el decreto ley para que las escuelas concertadas con problemas de viabilidad pasen a formar parte del sistema público o los planes de apoyo a las familias y para políticas de empleo, de 700 y 900 millones de euros, respectivamente. En este apartado, Aragonès también se ha referido al retorno de las pagas extras a funcionarios y trabajadores públicos de la Generalitat y ha criticado que el Ministerio de Administraciones Públicas lo recorriera. "Nos lo piden pero al mismo tiempo nos lo impugnan", ha criticado.

Con todo, Aragonès ha comentado que será el presidente del Govern, Quim Torra, quien próximamente haga un balance más exhaustivo del primer año de mandato.