Amnistía Internacional reclama a España y Marruecos "justicia para las víctimas" cuando está a punto de cumplirse un año de las muertes en la tragedia de Melilla. El 24 de junio del 2022 decenas de personas murieron al intentar saltar la valla de la ciudad autónoma. Amnistía asegura que 76 de las 2.000 personas que se calcula que intentaron cruzar todavía están desaparecidas y eleva la cifra de víctimas mortales a más de 100, una estimación muy por encima de la dada oficialmente por las autoridades: 23 muertos, según Marruecos. "Las autoridades españolas y marroquíes no solo siguen negando cualquier responsabilidad, sino que impiden los intentos de descubrir la verdad. (...) Se han bloqueado los esfuerzos por identificar a los muertos e informar a sus familiares", afirma la secretaria general de Amnistía Internacional, Agnès Callamard, en un comunicado emitido este viernes.

Para la ONG la reacción del Gobierno y marroquí "refleja el maltrato continuado basado en la raza y el estatus migratorio" que aplican sus fuerzas de seguridad en la frontera. En el caso concreto del Estado español, Amnistía denuncia que las autoridades siguen llevando a cabo prácticas ilegales como las expulsiones colectivas, a menudo con un uso excesivo de la fuerza". A punto de cumplirse un año de los hechos, la organización lamenta que "no se ha abierto ninguna investigación adecuada sobre las denuncias de crímenes de derecho internacional que se cometieron a ambos lados de la frontera" a pesar de que, según aseguran, "ocurrieron claramente bajo jurisdicción española" por estar las vallas y los lugares fronterizos en su territorio.

La organización defiende que eso comporta "una obligación de investigar todas las actuaciones que allí ocurrieron", pero en este año transcurrido "ningún funcionario, marroquí o español, ha comparecido ante la justicia por las violaciones de derechos que provocaron la muerte, la desaparición y heridas de tantas personas". Varias entidades internacionales, entre ellas el Consejo de Europa, también han exigido a España reiteradamente una investigación "independiente y efectiva" de las muertes en la valla de Melilla.

Más de 100 muertos, según Amnistía

Aministía Internacional eleva a más de 100 los muertos el 24 de junio del 2022 en Melilla, frente a los 23 reconocidos oficialmente por Marruecos, basándose en testimonios de supervivientes que apuntan al hecho de que hubo personas que murieron en el traslado en autobús desde la frontera hacia el sur del país "sin recibir ningún tipo de asistencia médica a pesar de la gravedad de las lesiones". En total, según sus datos, en torno a medio millar de los migrantes que intentaron acceder a Melilla fueron trasladados "a la fuerza" a "zonas remotas de Marruecos", situadas a más de mil kilómetros de la frontera, "donde las despojaron de sus posesiones y las abandonaron cerca de la carretera sin atención médica". "Estamos ante una cifra descomunal que habla por sí sola del sufrimiento sufrido por estas personas en la frontera", apunta la organización, que pone el foco en los más de 80 desaparecidos después del intento de entrada en Melilla, sobre los cuales teme que muchos de ellos podrían haber muerto porque sus familiares no conocen su paradero.

Denuncian la "obstaculización" de las autoridades

La ONG denuncia que "las autoridades marroquíes han obstaculizado las iniciativas de búsqueda de las personas desaparecidas y muertas", denegando visados a los familiares para que puedan ir a reconocer los cuerpos, la mayoría de los cuales "siguen en la morgue de Nador un año después". "Marruecos ha declarado que no enterrarán los cadáveres sin identificación, pero tampoco facilitan la identificación de los cuerpos", apunta Amnistía para denunciar que no se están dando avances en la vía abierta por el Ministerio sudanés de Asuntos exteriores hace tres meses para que los familiares enviaran muestras de ADN a Marruecos. En eso se une el "absoluto desamparo" en el cual se encuentran las familias de las víctimas, en las cuales "ni España ni Marruecos han ofrecido ninguna indemnización ni ayuda para conocer el posible paradero de los migrantes que continúan desaparecidos un año después de la masacre" en la frontera de Melilla, ahora "blindada", igual que la de Ceuta.