El president de la Generalitat, Quim Torra, y el vicepresident, Pere Aragonès, han recibido este sábado en el Palau de la Generalitat a más de 700 alcaldes de los 814 consistorios que han aprobado mociones en apoyo a los presos políticos y a la autodeterminación como rechazo a la sentencia del Supremo. "Ahora más que nunca no podemos desfallecer, estamos en un momento clave. Sólo juntos lo haremos posible. Sólo juntos tendremos la fuerza suficiente para acabar lo que empezamos. El pueblo así nos lo pide y tenemos que estar a la altura", ha advertido Torra desde el Pati de Carruatges mientras los alcaldes, con la vara en la mano, lo escuchaban copando la escalera noble y la galería del Palau. A pesar de esta apelación, el Govern ha tenido que escuchar durante el acto críticas sobre la actuación de los Mossos, tanto por parte del alcalde de la CUP Ramon Vancells como en la intervención del presidente del AMI, Josep Maria Cervera.

Este ha sido la segunda vez que se celebraba en la Generalitat un acto similar con los alcaldes. Las dos anteriores les habían recibido los presidentes Artur Mas y Carles Puigdemont. En esta ocasión ha sido Torra quien presidía el acto y en su parlamento ha situado a estos ayuntamientos como reflejo de la transversalidad ideológica del movimiento independentista. "Volveremos, lo volveremos a hacer, tozudamente volveremos", ha asegurado después de proclamar que ni la represión, ni los requerimientos judiciales, ni las amenazas de un nuevo 155 frenarán el compromiso de volver a celebrar un referéndum de autodeterminación porque la esta decisión ya no tiene camino de retorno.

Torra, que ha reclamado al Estado que se siente a negociar, ha reclamando no dejar de defender la "radicalidad democrática, el respeto por los derechos y el ejercicio del derecho a la autodeterminación" y ha advertido que hay que superar la dinámica de la queja y la lamentación para entrar en una dinámica constructiva y positiva, tomar la iniciativa". "Conjurémonos hoy a seguir adelante, siempre adelante", ha concluido para cerrar el acto con un "Visca Catalunya Libre!".

Catalunya, un solo pueblo

Se había encargado de abrir los parlamentos Aragonés, que ha subrayado que la fotografía de esta mañana demuestra que es falsa la imagen de división en Catalunya que se denuncia desde el Estado porque "a la hora de defender los derechos y las libertades democráticas, Catalunya demuestra que es un solo pueblo". "Actos como los de hoy constatan el desconocimiento de determinados poderes del Estado de la realidad catalana. Este no es un conflicto entre catalanes", ha sentenciado.

Aragonès ha admitido que el papel de los ayuntamientos es fundamental para garantizar el trabajo de cohesión social, por lo cual ha llamado a los alcaldes a ayudar a hacer inevitable el referéndum, conseguir la libertad del presos y el retorno de los exiliados. "Este es el camino. Avanzar como un solo pueblo por la libertad de Catalunya", ha concluido.

Denuncia de la CUP: "Nos avergonzamos"

Se han encargado de leer la moción las alcaldesas de Vic (Anna Erra), Calella (Montserrat Candini), Vilanova i la Geltrú (Olga Arnau), Maçanet de la Selva (Natàlia Figueras), Tàrrega (Alba Pijuan), Tortosa (Meritxell Roigé), Tremp (Pilar Cases) y los alcaldes de Monistrol de Calders (Ramon Vancells), Sant Feliu de Guixols (Carles Motas) y Tarragona (Pau Ricomà).

Durante la lectura, el alcalde de Monistrol de Calders se ha saltado el protocolo para denunciar seguidismo de las instituciones catalanas a la represión del Estado. "Nos avergonzamos como pueblo", ha reprochado.

Cervera: autocrítica

El responsable de lo Associació de Municipis per la Independència (AMI), Josep Maria Cervera, ha denunciado que "la sentencia ha hecho caer la rebelión pero ha dejado la venganza"; que el juicio fue "una farsa" que condena a los encausados "por lo que representan, lo que piensan y lo que anhelan" y que lo que se pretende es condicionar a la ciudadanía y limitar sus libertades.

"En el AMI sabemos que el movimiento independentista es pacífico y no violento y condenamos enérgicamente toda violencia y apelamos al diálogo y la negociación política como solución al conflicto", ha insistido a la vez que ha subrayado la importancia de las instituciones catalanas y la necesidad de preservarlas.

Por eso pedimos ser exigente en su gobernanza y no rehuir la crítica cuando toca, porque estamos convencidos de que es la manera de acercarla a la ciudadanía. Y ahora, con tranquilidad y sin demora hace falta hacer autocrítica y excluir comportamientos y elementos de nuestra policía que no nos identifica y nos avergüenzan", ha reclamando.

Ha denunciado una persecución judicial que quiere convertir a los "ayuntamientos en gestorías" y que los alcaldes no lo aceptarán, porque no son funcionarios sino electos que posicionan en temas que trascienden el ámbito municipal. "Si no nos permiten hacer política buscaremos espacios donde hacerlo", ha advertido antes de hacer un llamamiento a participar en la Assemblea d'Electes convocada por el president en el exilio, Carles Puigdemont.

El presidente del AMI ha denunciado el hecho de que la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, no se haya querido sumar al acto y que habrían querido atravesar la plaza Sant Jaume igual que en las dos anteriores ocasiones en que se han celebrado actos similares.