La candidata de En Comú Podem, Jéssica Albiach, ha asegurado que su partido defiende lo mismo en campaña y después de la campaña. "No podemos compartir gobierno con JxCat y Aragonès lo sabe", ha añadido este lunes en una entrevista en RAC1.

Albiach afirma que se trata de un tema "ideológico y de software" y ha puesto de ejemplo que JxCat no acepta la mesa de diálogo y prefiere la "confrontación". Por otra parte, ha apostado por acordar una "estrategia conjunta" para hacer frente a Vox en el Parlament. Según Albiach, no se tiene que hacer ningún pacto con ellos, no se les tiene que interpelar directamente y se los tiene que contrarrestar con "argumentos reales".

Albiach se ha mostrado "muy satisfecha" por los resultados de las elecciones, que mantienen a los comuns con los mismos 8 diputados que hasta ahora. Y en este sentido, ha añadido que "resistir es ganar" porque las encuestas hace un mes y medio les daban una bajada.

 

De esta manera, pues, la líder de los comunes trata de presionar a los republicanos con el fin de hacer un Govern "de izquierdas" que pudiera contar con algún tipo de apoyo del PSC, hazaña imposible mientras ERC mantenga el veto al mismo PSC, como de momento ya ha confirmado que hará.

Los comunes obtuvieron ayer un resultado que les permite frenar la tendencia a la baja de las últimas elecciones. Con ocho diputados, la formación es ahora la sexta fuerza, sólo por delante de Ciudadanos y el PP. De estos ocho, siete fueron por Barcelona y sólo uno por Tarragona. En Lleida y Girona la candidatura se quedó sin representación.

Noche larga

Probablemente la legislatura se les hará tan larga como la noche electoral, que no acabó con el escrutinio, sino con la visita inesperada de una patrulla de la Guardia Urbana de Barcelona. Según informó la Cadena SER, los agentes se presentaron después de que varios vecinos alertaran al 112 de que se estaba celebrando una "fiesta" en la sede del partido.

Una vez allí, la policía informó a los asistentes que no se podía celebrar ninguna fiesta, teniendo en cuenta el confinamiento domiciliario que hay en vigor en Catalunya para evitar la propagación del coronavirus. La patrulla de la Guardia Urbana de Barcelona pidió un responsable con el fin de informar sobre la situación. La alcaldesa de la ciudad todavía estaba en la sede.