El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha abierto hoy en el Congreso de los Diputados su primer debate sobre el estado de la nación como jefe del Ejecutivo y el vigésimo sexto de la democracia, aunque en esta cita no habrá el habitual "cara a cara" con el líder del principal partido de la oposición, Alberto Núñez Feijóo, ya que este no participará al no ser diputado. Casi la totalidad de los portavoces de los grupos parlamentarios están de estreno. Los líderes de los principales partidos, del PP, Unidas Podemos, Vox, ERC, Cs o de EH Bildu subirán a la tribuna por primera vez en un debate sobre el estado de la nación. Feijóo ha llegado al Congreso 20 minutos antes del inicio de la sesión y ha sido recibido con aplausos de gente que estaba en la calle y bajo la atenta mirada de decenas de periodistas que han acudido a la cita. De la misma manera, sus compañeros de partido lo han recibido con aplausos a su entrada en el hemiciclo.

Cuca Gamarra tomará la palabra

Alberto Núñez Feijóo ha acudido al hemiciclo y sigue de cerca la intervención de Sánchez -sentado junto a la portavoz de su grupo parlamentario, Cuca Gamarra,- pero no podrá intervenir al no tener la condición de diputado. Sí es posible que Feijóo pueda responder a Sánchez fuera del hemiciclo después de que el presidente haya explicado las medidas económicas que pretende implementar para proteger a las rentas medias y trabajadoras.

 

El funcionamiento del debate

Terminados los duelos parlamentarios y mientras el Pleno del Congreso realiza un primer debate sobre la reforma que permitirá acometer la renovación parcial del Tribunal Constitucional, se abrirá un plazo de 30 minutos para que los grupos presenten sus propuestas de resolución, un máximo de 15 propuestas por cabeza. Eso implica un total máximo de 150 textos que pueden ser objeto de enmiendas, pero que en ningún caso se pueden votar por puntos porque se haría eterno. El jueves se reanudará el Pleno del Congreso con el debate de esas 150 propuestas. Cada grupo dispondrá de quince minutos para defenderlas y la votación se realizará al final del Pleno, junto con el resto de asuntos del orden del día. El resultado de esas votaciones servirá para medir la fortaleza o debilidad de las alianzas parlamentarias del Gobierno de coalición.

Moncloa ha querido que el Pleno sirva para votar otros proyectos legislativos, además de la citada reforma para la renovación del TC. Así, en el orden del día se ha incluido también para ese jueves la Ley de Memoria Democrática, el decreto anticrisis aprobado el 25 de junio, y el decreto ley de esta semana que limita la temporalidad en el sector público sanitario. El último debate sobre el estado de la dación, la vigésimoquinta edición, tuvo lugar en 2015, con Mariano Rajoy como presidente del Gobierno. Dado el tiempo transcurrido desde, la cita de la próxima semana supondrá el estreno en estas lides de Unidas Podemos, Vox y Ciudadanos, ya que en 2015 ninguna de estas formaciones tenía aún representación parlamentaria.