Quieren decidir libremente su futuro, esquivando al gobierno español, al que "le cuesta mucho dejar que se pregunte", y después "aceptar la voluntad de la gente". El vocabulario se hace muy familiar, pero esta vez no hablamos del proceso catalán. Se trata en concreto de un rincón del territorio, Aiguafreda, que el próximo año votará si quiere formando parte del Vallès Oriental o integrarse en Osona.
El alcalde del municipio, Joan Vila, ha confesado a El Nacional que "no se trata de un referéndum", ya que para hacerlo habría que preguntar al gobierno español, y por esta vía es "imposible". Así, la votación, que está siendo impulsada por el Ayuntamiento, se podrá hacer de dos maneras: bien a través de la Ley de Consultas que el Parlament aprobó en 2014, bien a través de una encuesta.
No será la primera vez que Aiguafreda se pronuncia sobre la cuestión. El año 1987, en el marco de la 'recomarcalización' que impulsó el gobierno de Jordi Pujol, el municipio ya votó en un "sondeo voluntario" si quería seguir formando parte del Vallès Oriental o integrarse en Osona. El resultado fue claro: con una participación del 64%, la permanencia en el Vallès ganó de forma masiva con más del 90% de los votos.
La razón, afirma al alcalde, es que el Hospital General que tenían más próximo era el de Granollers –capital del Vallès Oriental-, por lo que la población no quiso arriesgarse al cambio. El motivo principal de los vecinos, de todos modos, tiene un punto de paradójico, porque sólo un año después, en 1988, se inauguró precisamente el Hospital General de Vic. "La gente se basa en hechos, y como justo en el momento de votar, todavía no había hospital general en Osona, optaron por Granollers", sentencia el alcalde Vila.
Con todo, el proceso hacia el 'referéndum' se inició hace unos meses, cuando el Ayuntamiento aprobó crear una comisión para estudiar el caso. Vila insiste en que todo esto no es ningún capricho del gobierno, sino que el consistorio se ha hecho eco de un movimiento que empezó a hacerse fuerte hace un año. El alcalde, añade, curiosamente, que en las elecciones municipales de mayo de 2015 "este todavía no era un tema de conversación en el pueblo", por lo que no fue en ningún caso objeto de campaña.
¿Sentimiento osonenc o vallesà?
El alcalde de Aiguafreda asegura que el pueblo "está muy bien en el Vallès Oriental", pero que el anhelo de esta consulta obedece más a cuestiones históricas y sentimentales. Hasta el año 1936, el municipio formó parte de las comarcas centrales, y más en concreto de la zona de influencia de Osona, por lo que el talante y sentimiento osonenc continúa vigente entre no pocos ciudadanos. Sin embargo, Vila reconoce que antes de la votación habrá que dar información "a los recién llegados y las nuevas generaciones", menos familiarizadas con la cuestión.
Si todo avanza como el Ayuntamiento indica, el próximo año se llevará a cabo el 'referéndum' y, en caso de que se imponga la opción de integrarse en Osona, el consistorio investigará los "caminos legales" para hacer posible la voluntad de la gente. Como se puede ver, la desobediencia, al menos por el momento, no es para Aiguafreda una opción.