Tensión e intercambio de acusaciones en las Corts de Castellano y León. El encontronazo ha tenido lugar entre el grupo socialista y Vox. El protagonista ha sido el vicepresidente de la Junta de Castilla y León, Juan García-Gallardo, que según Patricia Gómez y Nuria Rubio, procuradoras socialistas, les ha dirigido gestos de una simulación de una felación en el Parlamento autonómico. La acusación de las dos socialistas ha sido sostenida por otros presentes al pleno de las Corts leonesas, pero negada por García-Gallardo, quién ha afirmado que las señas que hacía simulaban la acción de llorar, en referencia a los socialistas.

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"Son unos llorones", ha insistido García-Gallardo defendido en que gesticulaba para interpretar unos llantos. Los hechos han desembocado en qué se ha suspendido el pleno de las Corts de Castilla y León durante unos 5 minutos, después de acusar al PSOE en Gallardo de esta actitud, García-Gallardo ha pedido intervenir al presidente de la Cámara, Carlos Pollán, también de Vox, quien también ha dado la palabra con el socialista Luis Tudanca.

 

El vicepresidente ha asegurado que tiene "paciencia" con las "agresiones" que sufre con sus compañeros de partido por parte de la oposición y ha calificado "patético" y "ridículo" que el PSOE quiera "tapar la gran traición" que observa a la negociación de la investidura de Pedro Sánchez con "cortinas de humo". Por su parte, los socialistas han exigido unas disculpas públicas, exigencia que ha quedado silencia cuando el presidente de la Cámara ha dado por acabada su intervención y ha cortado el micrófono de Tudanca. El partido socialista ha exigido la dimisión de dirigente de Vox.

Vox anima las protestas en Ferraz

La segunda noche de disturbios en Ferraz no ha moderado el tono de algunos líderes de Vox. Por ejemplo, Santiago Abascal, líder de la formación de extrema derecha, ha culpado al ministro del Interior en funciones, Fernando Grande-Marlaska, de la "violencia" a las protestas a la sede del PSOE en Madrid. Además, ha alertado de que su partido seguirá dando apoyo a las "protestas de resistencia" delante a los golpistas. En la misma línea, otros dirigentes del Vox no se han responsabilizado de la violencia delante la sede socialista en manifestaciones que han animado y siguen haciendo un llamamiento a las calles.