Este domingo À Punt, la nueva televisión pública valenciana, empieza sus emisiones regulares. Renace de las cenizas de Canal 9, inaugurada por el gobierno del PSPV el año 1989 y cerrada por el PP en el 2013, haciendo del País Valencià, desde entonces, la única región europea, con lengua propia, sin medios públicos de comunicación.

La promesa hecha en el año 2015 por el gobierno del Botànic (PSPV-Compromís) con el apoyo de Podem de abrir una nueva radio-televisión se ha hecho realidad, aunque el calendario de apertura se les ha ido de las manos. Aun así, la ciudadanía vuelve a disponer de la única oferta informativa en valenciano que nunca tendría que haber sido negada y que se suma al medio centenar de canales de televisión en castellano que se pueden sintonizar ya en cualquier televisor en el País Valencià.

Y como la fecha del 10 de junio es motivo de celebración, también hay que recordar otras fechas y declaraciones, que muchos valencianos y valencianas no olvidan, y que tienen que ver con la reciprocidad de las emisiones con TV3 y IB3, las únicas que no se pueden ver en el territorio valenciano. Hace falta, sólo, el "sí quiero" de sus gestores, la autorización administrativa del Ministerio de Industria o comprar un aparato técnico que tiene un coste de 60.000 euros. Refresquemos las fechas y las declaraciones públicas.

Queremos TV3

Visto bueno de Les Corts Valencians y el Senado

En el año 2013, como resultado de unas conversaciones previas mantenidas entre el expresident de la Generalitat Valenciana Francisco Camps y el exconseller catalán Joan Manuel Tresseras, Artur Mas y Alberto Fabra, presidents de Catalunya y el País Valencià, respectivamente, firmaron un acuerdo de reciprocidad de las emisiones de Canal 9 y TV3 que fue ratificado por Les Corts Valencianes y contó con el visto bueno del Senado español.

El documento fijaba la difusión efectiva de las emisiones de los canales de televisión de titularidad de la Generalitat de Catalunya (TV3, 3/24, Súper 3, 33, Esport3, TV3HD, TV3CAT) en el territorio valenciano, así como los canales de la Generalitat Valenciana (Canal Nou, Canal Nou HD, Canal Nou Dos, Canal Nou 24, Canal Nou Internacional) en el territorio de Catalunya. El cierre de RTVV pocos meses después impidió la reciprocidad.

El pacto, sin embargo, condicionaba la reciprocidad "a la disponibilidad del espectro radioeléctrico necesario, cuya asignación compete al Ministerio de Industria, Energía y Turismo". Este requisito vinculaba la recuperación de la señal de TV3 a la obtención de un nuevo múltiplex por el Govern valenciano. Precisamente, uno de los dos múltiplex que la Generalitat Valenciana perdió el año 2014 como consecuencia de la ofensiva recentralizadora del gobierno del PP y de la introducción de la telefonía móvil a través de esta vía.

Los presidents Puigdemont y Puig ratifican la reciprocidad

El año 2016, el president Carles Puigdemont recibió en el Palau de la Generalitat, al president valenciano Ximo Puig. Fruto de aquella cumbre, ambos hicieron el anuncio de la reciprocidad de las emisiones entre TV3 y la futura televisión pública valenciana. La vuelta de la señal se produciría a finales de aquel año, justo cuando estaba previsto que el nuevo Canal 9 se pusiera en marcha. Aquel pronóstico quedó en el aire al aplazarse el inicio de las emisiones de los nuevos medios públicos valencianos. También es cierto que el Govern valenciano no quería ni oír hablar de poder ver la cadena catalana antes del nacimiento de la futura televisión valenciana.

Enric Morera: "La reciprocidad está asegurada"

En el año 2017, el presidente de Les Corts Valencianes Enric Morera hizo una promesa en un acto público: "La reciprocidad con TV3 está asegurada. en cuanto se ponga en marcha la actual À Punt, puede hacerse efectiva. Yo mismo me encargaré de hacer las acciones para que sea posible".

Una fecha que no llega

Este año 2018, los dirigentes de la organización cívica Acció Cultural, la entidad más activa desde 1989 al hacer efectiva la reciprocidad de las señales de Canal 9 y TV3, han obtenido del secretario autonómico de Comunicació del Govern valenciano, José María Vidal, y del síndico parlamentario de Compromís Fran Ferri, la respuesta que "el calendario de vuelta de las emisiones se cumple". También de Antonio Montiel, ex síndico parlamentario de Podem, su apoyo y compromiso al vigilar que sea efectiva la vuelta de TV3 al mando de los habitantes del País Valencià. Nadie ha aportado fechas concretas.

Actualmente, el único múltiplex que hay en territorio valenciano está dividido en varias franjas: dos reservadas para la televisión pública valenciana y el resto en régimen de concesión a la Conferencia Episcopal a través de Mediterráneo TV y a Las Provincias TV que ha alquilado la licencia a Bom TV. La cadena propiedad de la Iglesia católica hace el mínimo de producción para que el Consell no pueda retirarle la licencia que disfrutan hasta 2026.

El Consell de la Generalitat Valenciana, consciente de esta situación, pidió al gobierno del Estado la obtención de un segundo múltiplex, tal como tiene, por ejemplo, Catalunya. Pero la respuesta, ha sido siempre negativa. Sin embargo, se podría haber alquilado uno como hizo IB3 con el fin de recibir la programación de la Corporació Catalana de Mitjans de Comunicació. La distribución de la señal por todo el territorio podría realizarla la red pública propiedad de la Generalitat.

IB3

TV3 y IB3, comprometidas. À Punt, no

¿Pero qué dicen respecto de la reciprocidad técnica y de contenidos los directivos de estas tres corporaciones públicas?

Brauli Duart, presidente de la CCMC hasta esta misma semana, ha declarado repetidamente su idea de "crear un consorcio de medios de comunicación conjunto entre las Illes, el País Valencià y Catalunya con el objetivo de elaborar canales comunes. "Se trataría de colaborar en contenidos, en la red de corresponsales, en aspectos técnicos, en la generación de programas y compartiendo servicios. Con las nuevas tendencias de consumo de la televisión, la creación de canales específicos on line entre las tres corporaciones sería un buen camino a explorar".

Vicent Sanchis, director de TV3, lo tiene claro: "Si fuera por nosotros, sí. Así se lo hemos comentado. Pero eso también dependerá del nuevo consejo de gobierno de la televisión valenciana, de su equipo directivo, de les Corts Valencianes... Nosotros podemos llegar tan lejos como ellos quieran —¡lo dice un valenciano!— porque sabemos que compartimos idioma y sabemos que compartimos cultura y sabemos que compartimos historia. Y sabemos una cosa que mucha gente en València también sabe: que un idioma fragmentado es un idioma débil".

Andreu Manresa, director de IB3, declaraba recientemente: "Estoy muy contento con las relaciones entre IB3 y TV3 y la colaboración conocida entre las dos empresas públicas de reciprocidad, doblaje... Ahora estamos ultimando un proyecto conjunto, que fue idea de Brauli Duart, que es producir un canal de radio y televisión en catalán por internet para emitir todo tipo de programación propia, series, programas de entretenimiento... que hemos ido haciendo las dos empresas a lo largo de la respectiva historia. La idea es que en el futuro, la televisión valenciana pudiera participar si quisiera.

Empar Marco, directora de À Punt, dicen que apostaba en su proyecto por "cooperar en la realización de algunos productos de manera conjunta". Esta misma semana ha declarado "que no se plantea participar en una plataforma que pueda compartir programas con TV3 y IB3 y que la reciprocidad es un tema del Consell"

Así están las cosas. Con sesenta mil euros y cumpliendo los compromisos adquiridos por los representantes de nuestras instituciones, la reciprocidad de las emisiones entre À Punt, TV3 y IB3 sería una realidad ya mismo. El domingo es día 10, pero no todo está a punto.