A las 11 y 21 minutos de la noche del 25 de noviembre de 2012, Pedro J. Ramírez, entonces director del diario El Mundo, tuiteó: “¡Quién nos iba a decir que en la redacción de El Mundo tendríamos la sensación de haber ganado unas elecciones autonómicas en Cataluña!”. El 16 de noviembre anterior, el diario había publicado en portada el titular "La Policía vincula cuentas en Suiza de Pujol y Mas con la corrupción de CiU". Artur Mas, que tenía 62 diputados y buscaba la mayoría absoluta después de la gran manifestación independentista del Onze de Setembre anterior, perdió 12 diputados.

Este episodio lo recuerda más o menos todo el mundo. Pero hay otro artículo más o menos célebre también del día siguiente, 26 de noviembre, en La Vanguardia. Es el análisis que hizo Enric Juliana, titulado "Gana España". Escribía Juliana: “Las elecciones catalanas las ha ganado España. Por decirlo de una forma más ortodoxa y más precisa, las ha ganado el statu quo español. Las ha ganado el orden vigente (…). Ha ganado el orden establecido español por un largo, largo, largo período histórico. (…) El Partido Alfa de las clases medias españolas, pese a las gravísimas dificultades que le plantea la crisis, sigue manteniendo el control del tablero”.

Y seguía: “Ha ganado el orden vigente. Y ha ganado porque este orden, con toda su aspereza y su impresentable kompromat para atemorizar al adversario, es objetivamente muy fuerte y la sociedad catalana ha desistido de concentrar en una misma narrativa los deseos de un orden diferente. El catalanismo es hoy una mayoría sentimental con graves dificultades de operatividad política”. El periodista advertía que "Catalunya, atrapada por la retórica sentimental del soberanismo, se convertirá en un avispero". Un avispero. No sé si les suena también la frase “antes que España se romperá Catalunya”. La dijo José María Aznar el 5 de julio de 2017.

El gobierno de turno, el PP, el PSOE, el poder judicial, la mayoría de medios de comunicación, las grandes empresas que pagan y la monarquía, es decir, los poderes del Estado, lo han hecho todo para mantener el statu quo y que siguiera ganando España

Llegamos a la actualidad. El diario El País publicaba ayer por la mañana en la portada de la edición de papel: "Interior avaló un falso informe de Villarejo contra el secesionismo". Y añadía: "El policía filtró el papel contra Mas y Pujol en plena campaña catalana". Es decir, que el gobierno español, el gobierno del PP, utilizó las cloacas para manipular unas elecciones. Y todavía faltaban cinco años para el referéndum. Ayer mismo, Pedro Sánchez le dio certificado de validez. A esto y a los piolines. Es decir, a la voluntad de pegar hostias.

Los periódicos son el primer borrador de la historia. Pero hace falta tiempo y perspectiva. ¿Verdad que ahora se entiende todo mucho mejor?

No sabemos qué hubiera pasado si Artur Mas hubiera tenido mayoría absoluta. No quiero decir que las cosas, para el independentismo y para el no independentismo, hubieran ido mejor. Quiero decir que se evidencia que el gobierno de turno, el PP, el PSOE, el poder judicial, la mayoría de medios de comunicación, las grandes empresas que pagan y la monarquía, es decir, los poderes del Estado, lo han hecho todo para mantener el statu quo y que siguiera ganando España. Y no, no va a pasar nada sustancial. Ahora se lo refriegan porque hemos vuelto al clásico de usar a Catalunya como arma electoral entre azules y rojos. Pero lo han hecho todo y seguirán haciéndolo todo. Es normal. Tienen sentido de estado. De un determinado modelo de estado, para ser precisos.