El entorno intelectual del primer Podemos quiere hacerse suyo el Green New Deal de la congresista Alexandría Ocasio-Cortez (y de paso hacerse suya la misma congresista, convertida en celebridad mundial y futura aspirante a la presidencia de Estados Unidos ). Héctor Tejero (Más Madrid) y Emilio Santiago (Ganar Móstoles), doctor en Biología y doctor en Antropología respectivamente, han escrito "¿Qué hacer en caso de incendio?", un manifiesto por el New Green Deal, con prólogo de Íñigo Errejón, que tiene más de pedagógico a la hora de analizar el diagnóstico del cambio climático que de solución a la concentración de gases de efecto invernadero. El incendio está bien explicado, lo que tenemos que hacer los bomberos para apagar el fuego es más dudoso. Quizás porque los autores básicamente proponen liquidar el capitalismo, como si la economía de mercado no hubiera traido ningún beneficio a la humanidad.

Lo que sí es verdad es que si cogemos las noticias de cada día y tiramos del hilo, muchas nos llevan a la crisis ecológica. Pregunten a Marc Castellnou por los incendios de La Ribera d’Ebre. Pregunten si la crisis de los refugiados tiene algo que ver con la sequía que sufrió Siria entre el 2007 y el 2010. O si no incrementará la presión migratoria a medida que el cambio climático convierta en inhabitables más territorios. Pregunten a Macron por la revuelta de los gilet jaunes.

50 años después de Woodstock, 50 años después de que unos jóvenes cuestionaran la forma de pensar y hacer del sueño americano, hay otra ola de jóvenes concienciados y de pensadores, una guerra de posiciones, que vuelve a querer una sociedad más justa, más libre y más verde. Una nueva ola que encabeza el movimiento feminista y medioambientalista. Son los nuevos hippies. No es extraño, por mucho sistema del que formen parte, que los anuncios de cerveza nos expliquen ahora que les preocupa el cambio climático, el mar y las tortugas. La publicidad siempre es un buen síntoma de los movimientos de fondo. Y el que llegará con más fuerza a partir de septiembre será el medioambientalista, que tendrá pronto su 8-M particular.

"Todo hombre y toda mujer tienen derecho a soñar que se enamoran, tumbados en una hamaca"

No sólo los autores citados aportan soluciones, sino muchos organismos como la propia ONU, que propone reducir el consumo de carne. Pero tal vez porque estamos en agosto, estoy a favor de una de las medidas que proponen los autores: un decrecimiento que nos dé más tiempo libre. Menos desperdicio material y más abundancia de tiempo. Paul Lafargue, recuerdan Tejero y Santiago, hablaba en el siglo XIX del derecho a la pereza. Si tenemos que volver a escribir los derechos humanos, los dos doctores proponen este: "Todo hombre y toda mujer tienen derecho a soñar que se enamoran, tumbados en una hamaca". La hamaca como espacio-tiempo idílico. Los sueños como inconsciente que no se puede mercantilizar. Y el amor como algo que no se puede comprar.

Lástima que tal vez lleguemos tarde. Una hamaca en un complejo turístico no es más que lo que hacíamos en un pueblo, ahora convertido en un privilegio por el que pagamos una fortuna. La publicidad influye en nuestros sueños para vendernos el producto que quieren. Y, el amor, ay, el amor. El amor está encapsulado en una app para la que necesitamos un móvil inteligente. Puede que la solución sí sea liquidar el capitalismo.