Dos noticias políticas de las últimas horas.

La primera nos lleva a Madrid. Podemos ha denunciado ante la Policía Nacional el desalojo “irregular” de sus despachos en el Congreso de los Diputados. Alega que a principios de semana alguien entró en las dependencias de sus diputados y las vació. Sacaron documentos, ordenadores y objetos personales, pero no desaparecieron, sino que quedaron en una “zona de paso”. Un inquietante bullying. ¿Quién ha sido? Es lo primero que se pregunta quien lo sufre. Pues, aunque no señalan formalmente a nadie, de forma oficiosa, en el partido aseguran que personal técnico de Sumar les dijo esta semana que fueron personas del propio grupo de Yolanda Díaz. Caramba.

La denuncia de Podemos llega pocos días después de que la Mesa del Congreso decidiera una reasignación de espacios de los grupos parlamentarios a raíz de la ruptura del partido de Ione Belarra con Sumar para pasar al Grupo Mixto. Los diputados de Podemos no habían abandonado hasta ahora los despachos que debían ceder a Sumar, con el argumento de que esperaban una comunicación oficial del Congreso en la que les informaran de su nueva ubicación. Por eso, desde la ruptura —el pasado 5 de diciembre—, mantenían sus salas en la misma planta que Sumar. Ahora habrán quedado castigados.

Al igual que ocurre en todos los trabajos, hay una gran batalla por tener los mejores despachos, en el Congreso, en el Parlament y donde sea

Esto es algo que no se ve. Pero al igual que ocurre con la asignación de escaños o que ocurre en todos los trabajos, hay una gran batalla por tener los mejores despachos, en el Congreso, en el Parlament y donde sea. Un día habrá que explicar a qué despacho enviaron en Europa a un político del que todo el mundo habla todos los días en Madrid.

En fin. La segunda noticia política nos lleva a Galicia. Donde el alcalde de Ourense, Gonzalo Pérez Jácome, ha optado por versionar —acompañado de otros dirigentes de su partido, Democracia Ourensana— el mítico In the Navy de Village People para pedir el voto y llevar a Ourense "a la Xunta". Poca broma. El empate entre el PP y las izquierdas le puede dar el voto decisivo a este controvertido político. Primer y único español en participar en la clásica subida al Empire State Building, promotor de la primera carrera de escaleras de edificios en Europa, en el Gran Hotel Bali de Benidorm. Fundador —sin licencia— del canal de televisión local Auria TV, donde se ha hartado de beber alcohol ante las cámaras. Liberal, populista, acusado de malversación y protagonista de unas polémicas grabaciones en las que presumía de ser un experto en blanquear dinero para campañas.

Y, mientras, ustedes preocupados por los campesinos y la sequía.