Al autónomo de estar por casa, al medianito, lo condenan a la economía sumergida. Aquella que supuestamente quieren evitar es la misma a que nos condenan. También tenemos la opción de trocar, claro está: tú me arreglas la nevera y yo te doy dos clases de inglés. Yo te doy un cesto de naranjas y tú me haces el tinte. Pero vaya, que eso no es eso y que hay gastos que no podemos intercambiar: agua, luz, teléfono, gasóleo. La nueva propuesta de cotización en la Seguridad Social incluye aquello que han denominado cuotas progresivas, como las gafas, las que les harían falta a ellos y a su miopía. Progresivo, dicen. ¡Ni progresivo ni progresista, tarambanas!

Las nuevas cuotas oscilarán, en función de los ingresos, entre los 184 € y 1.267 €, pero eso sería el año 2031. Digo sería, en condicional, porque vete a saber de aquí a allá cuántas veces han cambiado de opinión o de gobierno o de camisa. Mientras tanto, la famosa progresión hará que el que menos cobra —justito, justito el salario mínimo interprofesional— haya de pagar como siempre. Gracias. Ninguna rebaja sustancial o exención para poder arrancar un negocio. Además, los autónomos que facturan unos 2.000 € acabarán pagando el doble que ahora y los que facturan en torno a 3.000 € tendrán que pagar el triple. Y nos lo venderán como una ganga.

De la persona que gana menos de 600 € a la que gana más de 4.050, este año la diferencia de cuota es de 70 €

El punto de inflexión es si se ganan más de 1.125 € al mes (como si eso fuera la bicoca). En el momento en que se supere esta cifra, la cuota ya pasará a ser más alta que la actual. Y hasta los 1.300 € se acabarán pagando siempre 351,90 €. Nueva subida, además en un grupo muy numeroso de afectados. Lo más grave, sin embargo, a mi entender, es que de la persona que gana menos de 600 € a la que gana más de 4.050 este año la diferencia de cuota es de 70 €. Equidad no sería la palabra para definirlo, no. ¿Alguien nos puede explicar cómo es que aquel que gana menos está pagando el 40 por ciento de su sueldo, mientras que los que ganan más pagan solo el 10 por ciento?

¿Serán revisables estas cuotas y la cosa se quedará así? Lo digo porque si quien ha hecho esta chapuza de ley alguna vez en su vida hubiera sido autónomo, sabría que nuestra esencia es tener ingresos fluctuantes: tanto puede ser que un trimestre factures 700 € como en el siguiente declares 2.000 €. ¿Y entonces, qué hacemos? ¿Qué cuota pagaremos? Y si es revisable y eso implica —¡claro está! — más papeleo para demostrar esta variabilidad, significa que tendrás que pagar un gestor para que te lo solvente (más gasto), excepto si te lo sabes hacer tú misma, algo improbable, y que sea como sea te tomará tiempo de vida y tiempo que podrías estar dedicando a trabajar más para poder pagar las facturas y las cuotas infames.

La nueva propuesta nos divide a los autónomos en 13 tramos —el número de la mala suerte ya nos habría tenido que hacer sospechar— y eso puede tener un cierto punto de lógica, pero han hecho una chapuza. Muchos tendrán que trabajar B. La B de Bárcenas. La B de burro. En aquellos que cotizan menos del salario mínimo interprofesional o a los que no llegan a ingresar 600 € habría valido más la pena eximirlos del pago o que la cuota fuera mínima, más que nada para dejarlos respirar. ¿O es que nadie lo ve allí dentro del Ministerio que ganando 600 o 700 euros no puedes pagar 282 de autónomos a la SS, más el IVA y el IRPF, y pensar luego en el alquiler, comida, agua, luz y teléfono? ¿Saben lo que nos supone la declaración trimestral? ¿Cuántos de los lumbreras que han hecho la ley son o han sido autónomos?

La inmensa mayoría de los damnificados acabarán pagando mucho más y aquella minoría que se podría llegar a beneficiar pagar un poco menos porque, la pobre, ya cobra bastante poquito, quizás ni siquiera podrá darse de alta porque no le saldrá a cuenta o no se lo podrá permitir. Habrá más fraude y menos autónomos. Trabajar en negro ya no es una opción. Te obligan. Y cuando hagas trabajitos de extranjis para ir tirando y poder, simplemente, freír y comer, entonces irán a por ti por cuatro duros no declarados, que se ve que los pobres somos más fáciles de localizar que encontrar a quien era M punto Rajoy.