Mienten y lo saben. ¿Lo pagarán en las urnas? De momento, las encuestas no auguran la penalización del engaño. Será por aquello que dejó escrito hace más de 300 años Jonathan Swift en El arte de la mentira política de que “igual que el más vil de los escritores tiene sus lectores, el más grande de los mentirosos tiene sus crédulos”. Y la derecha española desde luego tiene los suyos.

Mal estreno en todo caso el del PP en esta campaña. Arrancan con más engaños. Dijeron que prohibían las estelades en la final de la Copa del Rey porque incitaban a la violencia y un juez les puso la cara sonrojada. Ni ilegalidad ni profanación, más bien un ataque a la libertad de expresión y un nuevo intento de sacar rédito de la malentendida unidad de España.

Dijeron que ya estaba bien de estrecheces y que ahora tocaba rebajar impuestos, y una carta de Rajoy a Juncker les ha dejado nuevamente de fuleros

Dijeron que ya estaba bien de estrecheces y que ahora tocaba rebajar impuestos, y una carta de Mariano Rajoy a Jean-Claude Juncker les ha dejado nuevamente de fuleros. Habrá nuevos recortes a partir de la segunda mitad de año. Así lo ha dejado escrito el presidente del Gobierno en funciones para evitar la multa que Bruselas impondrá a España por incumplir el objetivo de déficit público. ¿Recuerdan? El PP llegó a la Moncloa a lomos de la promesa de cuadrar las cuentas públicas que había dejado Zapatero. Otro cuento. La tijera volverá más pronto que tarde.

Dijeron que los papeles de Bárcenas, las obras ilegales de su sede y los sobresueldos fueron un invento de la prensa y de un presunto delincuente que se enriqueció a costa de sus siglas, y ahí tienen: pruebas caligráficas, testimonios de parte y hasta cinco escritos de otros tantos jueces y dos fiscales dando por buena la caja B de los populares. 

Sí, robaron. Demasiado hurto durante demasiado tiempo. Ahora tienen que pagar 1,2 millones de euros de la fianza que un juez ha impuesto para cubrir posibles responsabilidades civiles, pero ellos siguen negando la evidencia de un expolio que tendremos que pagar todos porque el dinero con el que se financian los partidos también sale de nuestros bolsillos. Ya lo ha dicho Santamaría: “El riesgo de impago es nulo”. ¡Y tanto! 

Igual es necesario todavía recordarlo: política y mentira suelen ser buenos compañeros

Pero ellos siguen con la matraca de que todo es falso, que la existencia de la caja B no está acreditada, que hay que esperar a la sentencia judicial, que han aprendido de los errores y que en todo caso les repugna lo ocurrido.

Igual es necesario todavía recordarlo: política y mentira suelen ser buenos compañeros. Pero mentir bien no es cosa que se improvise, sino un arte con todas sus reglas. Y este PP, que inventa guerras de banderas, promete bajar impuestos y niega con descaro que algunos de los suyos hayan saqueado las arcas publicas durante décadas, no ha aprendido todavía ninguna de ellas. Es lo que tenemos, pero seguro que no es lo que merecemos para los próximos cuatro años.