Hoy haré una cosa que podría parecer fea, pero tengo coartada. Hablaré de una serie que no he visto, pero es que la polémica que ha generado durante todo el día no tiene nada que ver con ella y haberla visto es lo de menos. De hecho, la mayoría de los que le lanzan improperios, no la han visto. Aquí la serie es la excusa. Es el culo donde todo el mundo lanza la patada que va dirigida a otro. Y ese otro es TV3.

Anoche, la cadena generalista de la TV pública de la Generalitat emitió dos capítulos de una serie denominada "Drama" (13,2% de audiencia el primero y 10,5% el segundo). El hecho de que algunos personajes hablaran en español, ha generado un follón de aquellos que tanto nos apasiona en este país. Pero insisto, la serie aquí no pinta nada ya que en otras producciones de la casa han aparecido actores hablando en español y no ha sucedido nada. ¿Cuál es ahora la diferencia? Que TV3 es uno de los terrenos de juego preferido para los puros y para los tabarneses para tirarse los platos por la cabeza. Y cuándo digo "puros" y "tarbarneses" es una definición llena de ternura usada sólo para que nos entendamos. Porque, ¿verdad que si digo "puros" y "tabarneses" todos nos entendemos? Pues no le demos más vueltas.

¿Qué pasa pues con TV3? ¿Por qué es el centro del debate? Adoctrinadora para los unos y floja nacionalmente para los otros. ¿Indepe radical o españolizadora del país? Mire, no le sabría decir, sobre todo porque si hacemos caso a los que usan esta terminología, ni ellos lo saben. Y no lo saben porque no la ven. O eso dicen. Los unos porque es demasiado golpista y los otros porque sólo salen traidores. Es decir, hablan de oídas por lo que les oyen a sus correspondientes gurús. Y como no la ven, quizás no saben que TV3 se aguanta con tres cañas y que ofrece la programación que puede y no la que quiere porque no tiene dinero. Que, puestos a debatir, quizás este sería el tema. Porque es la clave de la cuestión que nos ocupa.

¿Por qué TV3, la televisión nacional catalana, no tiene suficiente presupuesto como para poder producir contenidos propios de nivel ni tampoco comprarlos fuera? Y eso incluye los derechos para hacer una programación infantil competitiva que "acompañe" a los niños en catalán y los de acontecimientos deportivos competitivos que proporcionen audiencia en general y audiencia de la que nunca mira TV3 en particular. Pues no tiene presupuesto porque no hay dinero. Ha caído la publicidad, la casa tiene una plantilla absolutamente sobredimensionada y los menores de 45 años no miran la TV generalista sino otros contenidos audiovisuales contra los cuales es imposible competir ni económica ni empresarialmente.

El sector crítico con TV3 que lo acusa de adoctrinar y de ser poco plural (y que no se la mira), dice que no es la TV de todos. Sí, claro, como TVE no es la TV de todos los catalanes. Pero es que le diré más, tampoco lo es de todos los españoles. Ni el presidente de la Generalitat lo es de todos catalanes, ni el del Gobierno lo es de todos españoles, ni el Rey Felipe lo es de todo los españoles.

Para acabar, ¿me permite una pregunta? ¡Gracias! ¿Una cadena de TV pública generalista y nacional, para quien tiene que hacer una programación lo más plural posible y con el máximo de calidad? ¿Para quien se la mira o para quien no se la mira ni se la mirará nunca no por los contenidos sino por militancia?

Ah, por cierto, la famosa serie motivo de la polémica es una producción bilingüe de TVE (catalán-español), emitida tal cual por su canal en redes y que TV3 programó por dos motivos: 1/ porque no le costó ni un euro y 2/ porque es una serie pensada por el público joven que ni mira la TV ni mira TV3 y la cadena hace tiempo que intenta captar a este público. Pero, naturalmente, este debate no motiva a los profesionales del like.