El patrón va repitiéndose. Día X. La persona A tiene que comparecer ante el juez M para que este decida si continúa en prisión preventiva o sale en libertad. Pero resulta que el día X -1 (o incluso los días X -2 o X -3) la resolución que tomará el juez M aparece publicada en la prensa. Y normalmente el acierto en la previsión es del 307%.

O sea, antes de que el preso preventivo declare y sus abogados argumenten, el juez no sólo ya ha tomado la decisión sino que la sabe todo el mundo. Y eso último es lo más bonito de todo. Porque podría suceder que el juez lo tuviera claro y se lo callara, como para mantener las formas, ¿verdad? Pues no. Se desconoce por qué extraño mecanismo, pero su decisión la venden a kilos en los bazares de chinos. Entre las pinzas de la ropa aquellas que el segundo día les salta el muelle y los trapos de cocina que nunca quedan limpios, ni lavándolos a 90 grados con ácido sulfúrico en el reactor de Vandellòs.

Naturalmente, a partir de aquí viene una reflexión y las correspondientes preguntas: pues si está muy decidido de antemano, ¿por qué el juez hace ir a declarar a la gente? ¿Quiere que les toque el aire? ¿Le gusta que la gente viaje? ¿Se aburre? ¿Está añorado?

Y la respuesta es... ¡NO! ¡Donde va a parar! Estas preguntas no son pertinentes porque la justicia siempre actúa con independencia, con garantías y de manera justa (como su propio nombre indica). Y ahora usted, seguramente, pensará hacia sus interiores: "Aquí pasa alguna cosa extraña. Esto tiene que tener una explicación. Si un juez nunca haría una cosa así, ¿qué está pasando aquí?". Pues mirémoslo. Analizamos las diversas posibilidades:

- Los periodistas que saben lo que decidirá el juez antes de que el propio juez haya decidido nada llaman a los programas estos donde te adivinan el futuro y preguntan a la bruja/brujo: "Oiga, ¿qué decisión tomará pasado mañana el señor M sobre la persona A?". Y el brujo consulta las cartas (o las bolas, o hace la carta astral) y les dice el qué.

- Los periodistas que saben lo que decidirá el juez antes de que el propio juez haya decidido nada descubren la decisión usando la telepatía inversa. Consiste en introducirse en el cerebro del juez usando métodos de hackers, pero aplicados al sistema neuronal, y obtener la información yendo hasta el subconsciente inactivo, que es donde el juez la guarda. Y una vez allí, la leen. Y la explican.

- Los periodistas que saben lo que decidirá el juez antes de que el propio juez haya decidido nada lo saben porque realmente la decisión la toman ellos y, vía la telepatía inversa ya citada en el punto anterior, la transmiten al lugar del cerebro donde el juez guarda las decisiones. Y la dejan allí. Y cuando, al cabo de un par o tres de días, el juez tiene que tomar la decisión, las neuronas van al rincón de las decisiones a buscarla, se encuentran con que allí ya hay una decisión, se piensan que es la que acaba de tomar, y la dan por buena.

- Los periodistas que saben lo que decidirá el juez antes de que el propio juez haya decidido nada tienen un 50% de posibilidades de acierto y... siempre la aciertan. Dígale magia, dígale suerte... Lamentablemente, esta habilidad todavía no la tienen muy desarrollada a la hora de saber los números de la loto.

- Los periodistas que saben la decisión del juez antes de que el propio juez haya decidido nada disponen de una máquina del tiempo. Ellos están, por ejemplo, en el día X -3 y la programan para ir al futuro, al día X. Van, miran cuál es la decisión del juez y, con esta información vuelven al pasado del día X -3, que realmente es su presente. Y entonces explican cuál es la decisión que será tomada tres días después, porque ya la saben, porque ya han estado en la posteridad.

Y seguro que todavía hay muchas más justificaciones, todas ellas también muy ciertas, que explican este fenómeno tan entrañable consistente en que las decisiones judiciales relacionadas con los indepes, no sólo tienen una solidez jurídica granítica sino que se toman de forma independiente, no arbitraria y ajustada a los tiempos procesales. No sufra, que otro día se las explico.