El Mundial de Rusia entra en la última semana de competición. En siete días ya se conocerá el nombre del equipo que sucederá a Alemania en el trono del fútbol de selecciones. Una de las semifinales, la que enfrentará a Francia contra Bélgica, será muy especial para una leyenda del fútbol: Thierry Henry.

Henry, campeón del mundo con Francia el año 1998, es uno de los asistentes del catalán Robert Martínez, entrenador de Bélgica. El exjugador del Barça asumió el reto de acompañar a Martínez cuando se hizo cargo de la selección belga después de la Eurocopa del 2016.

El camino de Bélgica hacia Rusia ya fue impecable. Los belgas ganaron nueve de los diez partidos de clasificación para sellar con mucha comodidad su billete para el Mundial. Ahora, afrontan el momento más importando de su historia. Y es que nunca habían llegado hasta la penúltima ronda de una Copa del Mundo.

Henry, uno de los culpables del gran rendimiento del delantero Romelu Lukaku, vivirá el partido contra Francia con el corazón dividido. Si Bélgica, después de eliminar a Brasil, consigue llegar a la final, celebrará la gesta de Robert Martínez, su gran valedor. Si Francia cumple con su condición de favorito verá cómo sus compatriotas estarán a sólo un paso de conseguir la segunda estrella.