Los que hace ya muchos años que tiene una Toyota como una de sus marcas de referencia sabes muy bien que el fabricante japonés siempre se ha caracterizado por ser un fabricante en el que el diseño de sus coches ha sido un factor diferencial en muchos casos.

Por mucho que el elemento clave de su éxito en los últimos tiempos ha sido su apuesta clara por los motores híbridos, Toyota es un fabricante que siempre ha tenido también mucho peso entre los amantes de los coches con muchas actitudes todo terreno, con modelos tan icónicos en el mercado como es el caso del famoso Land Cruiser.

 

Un modelo que de hecho ha sido recientemente renovado y que ha estrenado una nueva generación con un nuevo lenguaje de diseño y que apunta a seguir ampliando la fama de este todoterreno emblemático en la industria. Sin embargo, cabe destacar que uno de los modelos que me has llamado atención del fabricante de Japón no es que vaya a convertirse precisamente en un modelo de producción, sino que es fruto de una apuesta más que arriesgada en cuanto a diseño.

El Toyota Baby Lunar Cruiser, un prototipo peculiar

Y es que ha sido a través de un estudio de diseño que tiene la marca japonesa en Estados Unidos llamado Calty y que lleva trabajando desde hace ya varias décadas en prototipos y en modelos conceptuales el que ha presentado ahora un modelo que está pensado ni más ni menos que para exploraciones más allá de la Tierra.

No es otro que el Toyota Baby Lunar Cruiser, un todoterreno de hidrógeno que a su vez está basado en el prototipo desarrollado conjuntamente por Toyota y la Agencia Japonesa de Exploración Aeroespacial (JAXA) que se presentó por primera vez en el año 2020.

 

En este caso, más allá de que las dimensiones de este Baby Lunar Cruiser sean mucho más reducidas, llama especialmente la atención su diseño, entre otras cosas porque buena parte de la fuente de inspiración de los diseñadores ha sido el famoso Toyota FJ40, uno de los todoterrenos más emblemáticos e icónicos de Toyota.

Evidentemente este Baby Lunar Cruiser no se va a convertir en ningún caso en un modelo de producción, pero no deja de ser un ejemplo perfecto de cómo prototipos de este estilo e ideas quizás tan extravagantes como estas pueden acabar derivando en algunos diseños futuros de modelos de producción.