Es de sobras conocido que con la llegada de las nuevas tecnologías también, más allá de facilitarnos el día  a día de forma evidente, han llegado también nuevas estafas, diferentes maneras por las cuales los delincuentes pueden acabar cometiendo una serie de delitos que acaban suponiendo un problema grave y un disgusto para muchos.

Uno de los más habituales en los últimos tiempos es un delito que pasa por hacerse pasar por un organismo oficial para así recabar información e incluso acabar aceptando algún pago a través de una tarjeta de crédito. Un buen ejemplo de ello es una de las estafas que, desde el Instituto nacional de Ciberseguridad, más recurrentes en los últimos tiempos: el timo de la multa falsa.

La estafa de las multas falsas

Como en tantas otras estafas de este tipo, lo primero que hacen los delincuentes es enviar un SMS haciéndose pasar por la Dirección General de Tráfico en el que apuntan que el periodo para pagar una multa en concreto está apunto de expirar, y dejan un link en el SMS en el que aparece el número de sanción, haciendo creer al que has recibido el mensaje que se trata evidentemente de una multa oficial.

Una vez se accede a este link los delincuentes, haciéndose pasar evidentemente por la DGT, reclaman una serie de datos personales como es el caso del nombre, la dirección, el correo electrónico, etcétera. Una vez ya tienen estos datos no hacer otra cosa que detallar el importe de la sanción y que, sobre todo, si se opta por pagar a plazos el importe final será más elevado, por lo que muchos acaban cayendo en la trampa y yo tan por pagar en ese momento.

Como ocurre en tantos otros pagos a través de Internet, los delincuentes piden el número de la tarjeta y los diferentes códigos de acceso a ella, para, una vez el estafado le da a pagar, aparece una página en la que se expone que ha habido un problema y ya no se puede volver a recargar, por lo que los delincuentes y ha logrado todo lo que buscaban.

En este sentido, cabe tener en cuenta que la DGT tan solo comunica las diferentes multas a través del correo postal y que, además, para asegurarnos de no tener ninguna multa pendiente de pago, podemos acceder a una sección en concreto a través de la aplicación miDGT, que evidentemente sí que es oficial y sin riesgos.