Hablar de coches eléctricos es hablar inevitablemente de sus baterías. Para muchos conductores, ese componente sigue siendo un motivo de preocupación: ¿qué ocurre si se estropea?, ¿cuánto cuesta sustituirlo?, ¿es fiable a largo plazo? Las dudas son frecuentes, pero en el caso de Kia las respuestas resultan bastante tranquilizadoras.
Si hablamos de números, la realidad es menos dramática de lo que muchos imaginan. El precio de sustituir un módulo de batería en un Kia eléctrico se mueve entre 1.600 y 2.860 euros, dependiendo de la versión. Un coste considerable, sí, pero muy alejado de las cifras de decenas de miles de euros que a veces circulan como mito en torno a los eléctricos.
Kia tiene las baterías más fiables del mercado
En cualquier caso, es muy difícil que un cliente de Kia llegue a ese punto. La firma surcoreana ha logrado situarse entre las más seguras en este terreno. Los datos recopilados durante más de siete años demuestran que sus tasas de fallo son mínimas. Apenas un puñado de incidencias frente a miles de vehículos vendidos en Europa, una cifra que coloca a Kia entre las marcas con mejor reputación en cuanto a tecnología de baterías.
Además, el fabricante no se ha limitado a dar cifras. En su red de talleres cuentan con un sistema propio que permite identificar el módulo exacto afectado en caso de avería. Esto significa que no es necesario reemplazar toda la batería, como muchos temen, sino solo la parte concreta que presenta problemas. Una solución que reduce enormemente los costes y agiliza las reparaciones.
Tan segura está Kia de sus baterías que incluso han ampliado la garantía
Los conductores, por su parte, disponen de avisos claros en la instrumentación si algo va mal. Luces de advertencia, autonomía reducida o tiempos de carga más largos sirven como señales tempranas. El consejo de la marca es simple: acudir de inmediato a un servicio oficial, donde se comprueba el estado de la batería y, si es necesario, se sustituye el módulo defectuoso.
En cuanto a la cobertura de garantía, Kia se ha mostrado más generosa que la mayoría de competidores. La marca asegura un 80 % de capacidad durante los cinco primeros años o 100.000 kilómetros, y un 70 % desde el sexto hasta el octavo año o 160.000 kilómetros. Una política que refleja la confianza en la calidad de sus baterías y que refuerza la tranquilidad de los compradores.