No son pocos los conductores, y en Peugeot y en Citroën lo saben muy bien, que cada vez tienen más en cuenta el tiempo de entrega de un coche nuevo como uno de los factores determinantes en cuanto a la compra de uno u otro.

La crisis de suministros que está azotando al mercado del automóvil ha provocado que muchas marcas ya dejen muy claro a sus clientes que los tiempos de entrega de los vehículos nuevos son mucho mayores de lo que era habitual hasta hace apenas unos meses.

Tiempos de entrega que alargan aún más cuanto mayor sea la personalización del modelo en concreto. Es por eso que uno de los mayores reclamos actualmente entre las marcas generalistas es la entrega inmediata.

Para ello, marcas como Peugeot o Citroën está ofreciendo buenos descuentos en sus unidades en stock, unidades ya fabricadas y configuradas que cuentan con un descuento precisamente por el hecho de que el cliente no puede cambiar nada de ellas.

En este sentido dos de los modelos que más llaman la atención dentro de esta oferta de stock son precisamente dos de los superventas de cada una de las marcas. Por un lado, el Peugeot 2008, el SUV más vendido de los franceses, por otro, el Citroën C4, una de las revelaciones del segmento de los compactos con aires de crossover. Teniendo en cuenta que los dos modelos tienen un precio similar, la pregunta es más que idónea: ¿cuál es mejor comprar?

El Peugeot 2008 y el Citroën C4, dos superventas en España, están de oferta en stock

Si nos fijamos en los precios, vemos que el Peugeot 2008 en stock y entrega inmediata tiene un precio de 21.821 euros con 400 euros de descuento ya aplicados. Por otro lado, el Citroën C4 tiene un precio de 21.870 euros con 1.700 euros de descuento que el fabricante ya ha aplicado a su precio.

El precio, por lo tanto, no es precisamente un argumento crucial para decidirse entre estos dos modelos. Si lo es su diseño y sus motores. El Citroën es un crossover puro y duro con todo lo bueno y malo que eso implica, es decir, un diseño más atractivo quizás que el del 2008 pero con una menor habitabilidad y capacidad de carga. El Peugeot, por el contrario, es un SUV compacto, un modelo pensado quizás más para familias pequeñas que no busquen tanto dinamismo y sí mayor comodidad.

Pero la principal diferencia entres estos dos modelos de oferta llega en sus motores. Los dos cuentan con el 1.2 Puretech del grupo, pero en el caso del Citroën, el C4 llega con la versión de 130 caballos mientras que el Peugeot lo hace con la de 100, por lo que las prestaciones son mejores en el caso del C4.

Así, teniendo en cuenta que por el mismo precio podemos tener un modelo más potente y polivalente, el Citroën C4 debe de ser la opción a escoger sin olvidar, eso sí, que este 2008 no se ha convertido en un top ventas por casualidad.