No es que sea precisamente ningún secreto que la llegada de la tecnología ha ayudado mucho a la industria del automóvil y a todo lo que la rodea. En este sentido, estas obras conocido que uno de los aportes más atractivos es el que llega de la mano del pago sin contacto a través de unos sistemas los que no es necesario introducir la tarjeta de crédito en los surtidores de, por ejemplo, gasolineras que funcionan 24 horas.

Eso sí, son precisamente este tipo de dispositivos los que más llama la atención de los estafadores, especialmente de aquellos que tienen altos conocimientos de tecnología hay que saber muy bien que, instalando varios sistemas que ayudan a copiar los datos de la tarjeta de crédito, luego pueden llevar a cabo diferentes estafas con ellas.

Pero lo curioso en este caso es que en España se ha dado un timo que, si bien es cierto que no ha supuesto tampoco mucha pérdida para la propia gasolinera, no deja de hacer evidente que, en algunos casos, el uso de cierto tipo de tecnología no siempre es favorable.

El timo del instalador de surtidores

En este caso se ha llevado una investigación en la que se ha concluido que un hombre ha sido capaz de poder rellenar más de 500 l de combustible en diferentes ocasiones por un valor de 800 €, y lo ha hecho evidentemente sin pagar ni un euro.

El protagonista en cuestión es un experto en la instalación de surtidores en las gasolineras, por lo que evidentemente sabe muy bien cómo funciona en este tipo de dispositivos y, sobre todo, sabe muy bien qué es lo que podía hacer, de ahí que lo haya hecho, para acabar robando muchos litros de combustible.

El fallo en este caso por parte de la gasolinera fue el hecho de no cambiar el pin que permite que, una vez se haya abierto un surtidor a través del mando a distancia, éste se desbloquee. Así, este instalador de surtidores se encontró por primera vez con que, teniendo uno de esos mandos de distancia y probando con el pin que llega por defecto el surtidor, éste se abría y, por lo tanto, ha podido robar unos 500 litros de combustible.

Es más que evidente que este timo, al contrario de lo que suele ser habitual, no ha afectado a los usuarios de la gasolinera sino a los propietarios, y que lo ha llevado a cabo un experto y que por lo tanto no estaría al alcance de cualquiera, pero no deja de ser curioso que, en algunos casos, incluso las medidas de seguridad más lógicas acaban siendo la mejor arma para los estafadores.