Hace ya muchos años que el modelo más vendido de Kia en nuestro país es el Sportage, un SUV de tamaño compacto que ha ido evolucionando y dando pasos importantes adelante con cada una de las generaciones, especialmente con la actual, que puede presumir de ser uno de los mejores modelos en su categoría en lo que se refiere relación calidad precio pero también es lo que se refiere a diseño, tecnología, motores y equipamiento.

 

Pero como bien saben en la marca coreana, mucho que este modelo puede presumir de ser el auténtico rey de ventas en su categoría en nuestro país, dentro del amplio catálogo que tiene Kia a la venta en España hay una opción que también ha encontrado su particular espacio en nuestro mercado, entre otras cosas porque es una opción destinada a aquellos que no quieren saber nada de los motores de combustión tradicionales.

El Kia Niro, una opción muy interesante

No es otro que el Niro, un modelo que en esta segunda generación ha seguido apostando por la misma fórmula que lo convirtió en un exitoso modelo en la primera, es decir, un crossover que tan solo se puede configurar con motores híbridos, ya sea híbrido auto recargable o híbrido enchufable, o un motor 100 × 100 eléctrico, pero en ningún caso se puede configurar con motores de combustión tradicionales ya sea de gasolina o diésel.

 

Si bien es cierto que se queda un escalón por debajo en cuanto a habitabilidad y capacidad de carga respecto al Sportage, este nido puede presumir de tener un precio de partida contando con todas las promociones y descuentos que se queda por debajo de los 28.000 €, es decir, el mismo precio que tiene la versión más sencilla del Sportage, que en su caso llega con un motor de gasolina de 150 caballos.

El Niro lo hace con un motor híbrido auto recargable de 140 caballos, una mecánica que acabó ofreciendo un consumo mucho más bajo, especialmente en conducción urbana, y que le permite además lucir la etiqueta ECO de la DGT, aunque el modelo superior me puede decir al menos en su versión de acceso. No es casualidad entonces que, a no ser que se necesite mucho espacio mucha habitabilidad de caza, no sean pocos los que, al ir a por un Sportage, acaben optando por un Niro, una compra quizás más racional por precio.