Motoristas, peatones y ciclistas son un colectivo vulnerable y el año pasado supusieron al 42% de los muertos en las vías gerundenses. En total, sumaron 14 víctimas mortales el año pasado: 8 motoristas, 4 peatones y 2 ciclistas.
La seguridad de los motoristas es prioritaria para el Servei Català de Trànsit (SCT). El motorista es frágil y un accidente puede comportar graves lesiones o la muerte. En este sentido, la actitud y la pericia del motorista es primordial. Hay una serie de riesgos a los cuales se exponen los motoristas por el hecho de conducir o viajar en un vehículo de dos ruedas, que los hacen más vulnerables: la inestabilidad del vehículo, las dimensiones de la motocicleta o ciclomotor, que hacen que el motorista corra el riesgo de no ser visto por los otros usuarios de la vía pública, y la falta de carrocería, que exige llevar el equipamiento adecuado. La velocidad también es una cuestión primordial: hay que conducir a la velocidad adecuada a la vía y a las circunstancias de la circulación, de forma que se pueda controlar o parar la motocicleta ante cualquier imprevisto o situación de emergencia.
Equipamiento para motociclistas
El equipamiento es para los motoristas el que la carrocería es para los conductores del resto de vehículos. Por eso, el equipamiento indispensable para circular en moto con seguridad tiene que contemplar los siguientes elementos de protección: casco (protege la cabeza), espaldera (protege la columna vertebral y puede evitar lesiones medulares graves), guantes (es conveniente utilizar los que tienen refuerzos en la palma y en el dorso), chaqueta y pantalones o mono y botas (pueden evitar heridas graves producidas por abrasión).
Aumentan los ciclistas
La bicicleta es un medio de transporte que cada vez utilizan más usuarios. La sociedad tiene que aprender a convivir con los ciclistas en las vías urbanas e interurbanas y a proteger a este colectivo especialmente vulnerable. Hace falta tener paciencia y respetar el metro y medio, como mínimo, de distancia lateral en los adelantamientos.
Por otra parte, aunque no se necesita permiso de circulación para ir en bicicleta, sí que hay muchas normas que hace falta conocer y respetar para circular con seguridad. Hay que recordar, por ejemplo, que mientras se circula en bicicleta está totalmente prohibido utilizar el teléfono móvil. También están prohibidos los auriculares conectados a receptores o reproductores de sonido, porque estos limitan la capacidad auditiva y pueden provocar distracciones.
Además, es altamente recomendable circular por los carriles bici, siempre que estén disponibles. Los ciclistas también tienen que ceder el paso a los peatones en los pasos para peatones debidamente señalizados y cuando giran para entrar en otra vía, si hay peatones cruzándola, aunque no haya ningún paso marcado en el suelo.
El casco es un elemento protector vital, obligatorio a las carreteras y para los menores de 16 años en ciudad. No obstante, es muy recomendable llevarlo en ciudad, dado que protege la cabeza de lesiones graves. El respeto por las señales también evita accidentes y salva vidas: es fundamental respetar las señales de los semáforos, así como los verticales (stop, ceda el paso, velocidad limitada, etc.) que son para todos los conductores, incluidos los ciclistas.
Los adelantamientos
Con la nueva ley de Tráfico -entró en vigor el 21 de marzo de 2022-, el conductor de un vehículo que quiera realizar un adelantamiento en un ciclomotor o ciclista, o conjunto de ellos, lo tiene que formar ocupando parte o la totalidad del carril contiguo o contrario, si procede, y guardando una distancia lateral de seguridad de al menos 1,5 metros. Conviene recordar que se permite ocupar el carril en sentido contrario, aunque haya una línea continua, siempre que no venga ningún vehículo de cara. En caso de que la calzada cuente con más de un carril por sentido será obligatorio el cambio completo de carril. Hay que tener presente, por tanto, que adelantar ciclistas de manera incorrecta supone una sanción de 200 euros y la detracción de 6 puntos.
Siniestralidad de los peatones
El año pasado perdieron la vida 14 peatones en las carreteras catalanas, 4 de ellos en la demarcación de Girona. Este año, han muerto ya 17 peatones en zona interurbana. Las cifras suponen un toque de alerta y, en este asentido, conviene recordar la importancia de extremar la prudencia y protegernos si tenemos que bajar del vehículo o nos detenemos en el arcén. Lo más indicado, de hecho, es parar el vehículo fuera de la vía, y si eso no puede ser, situarnos tras la valla de protección. Si hay que circular caminante por una carretera, lo haremos por el lado contrario a la circulación de los vehículos.
En las áreas urbanas, hay que evitar comportamientos incorrectos y peligrosos, como atravesar la vía por un lugar indebido. Es muy importante mirar bien en ambas direcciones antes de atravesar una calle, utilizar el paso de peatones y respetar los semáforos. También hay que tener muy presente la distracción que genera el uso del teléfono móvil mientras se camina por la vía pública.